■ La defensa de los acusados rechaza el cargo de “alarma social”
Encarcelan a 7 jóvenes españoles detenidos en un mitin solidario con sus pares griegos
Madrid, 12 de diciembre. Los siete jóvenes que fueron detenidos el pasado miércoles en un acto de rechazo a la muerte de un joven griego y que derivó en un ataque a una comisaría madrileña, serán encarcelados, dictaminó hoy una juez de los tribunales ordinarios de la capital española.
La Fiscalía del Estado también solicitó la prisión, al considerar que la liberación de los jóvenes anarquistas y antifascistas podría provocar “alarma social”.
Ese miércoles por la noche, unas 300 personas se manifestaron en el centro histórico de Madrid en solidaridad con protestas en Grecia y para denunciar la “brutalidad policial” que provoca, en algunos casos, las muertes como la del adolescente griego.
El acto derivó en un ataque con piedras y mobiliario urbano a la comisaría de la calle Montera, que se saldó con nueve detenidos –dos de ellos menores de edad– y cuantiosos daños materiales, además de más de una docena de heridos, tres ellos policías.
Desde su detención, los siete mayores de edad han estado bajo custodia policial hasta la mañana de hoy, cuando prestaron por primera vez declaración ante la jueza de instrucción, que acordó dictar prisión sin derecho a fianza.
Significa que los jóvenes, salvo decisión en sentido contrario, deberán permanecer en prisión hasta que se celebre el juicio; suelen tardar entre siete y 10 meses.
Los siete jóvenes, vinculados con grupos antifascistas fueron trasladados a la prisión de alta seguridad de Soto del Real, y a la cárcel de Alcalá Meco.
Su abogado, Erlanzt Ibarrondo, explicó que “el argumento de alarma social no se puede esgrimir porque algunos de ellos no tienen antecedentes. Además, uno de mis defendidos, que es muy joven, no tiró ni una sola piedra a la comisaría porque estaba en la mitad de la manifestación”.
La legislación española establece penas de hasta tres años de cárcel por el delito de desórdenes públicos, pero la condena podría ser aún peor si también son acusados y condenados por los delitos de lesiones y atentado contra la autoridad, debido a que al menos tres policías resultaron heridos durante la reyerta.