■ Mexicanos de tercera generación ganan más que recién llegados, dice
El tiempo de residencia de paisanos en EU determina su condición laboral: académica
En Estados Unidos existen diferencias sustanciales entre los mismos paisanos, debido a que el tiempo de residencia en ese país es un factor que determina las condiciones laborales de los inmigrantes e influye para mantener o desaparecer desventajas económicas.
Sin embargo, aunque con el tiempo logran superar algunas desigualdades salariales, no han obtenido los beneficios que tienen los trabajadores nativos blancos no latinos, aseguró la académica del Instituto de Investigaciones Sociales de UNAM, Maritza Caicedo.
Explicó que un mexicano que ha vivido menos de 10 años en la nación vecina, suele realizar trabajos de menor valía social para esa población, lo que representa que 52.8 por ciento de ellos laboran como obreros en la industria, en la construcción o en mantenimiento.
Esta situación, dijo, difiere de aquellos de tercera generación (ya nacidos en Estados Unidos) que se identifican como de origen mexicano, quienes ocupan 25.9 por ciento en los mismos sectores y de los nativos blancos, donde sólo 20.6 por ciento es obrero.
En este panorama, Caicedo indicó que 38 por ciento suele obtener empleos mejor remunerados, pues son contratados como ejecutivos y sólo 4.2 de connacionales del grupo de recién llegados puede acceder a esos cargos.
Estas diferencias laborales propician variaciones sustanciales en los ingresos que perciben los mexicanos con respecto a los descendientes y los nativos. Los blancos no latinos perciben 16.7 dólares por hora, un mexicano de tercera generación 12.8 y 8.7 uno recién incorporado.
Esta diferenciación priva también con las mujeres, quienes reciben menores ingresos que los varones. El salario de las nativas, con relación al que percibe el sexo opuesto, es de 14.4 dólares por hora, 12.1 para las de tercera generación y para las de reciente arribo el pago es de 7.2 dólares.