■ Plantea que en la CNSM se considere “resarcir algo” de la inflación del presente año
Injusto, aumentar los salarios mínimos menos de 4 por ciento, afirma Lozano
■ Propone “armonizar” las posiciones de patrones y trabajadores para preservar los empleos
Ampliar la imagen Un acuerdo salarial por consenso “enviaría una buena señal”, sostiene Javier Lozano Alarcón, titular de la Secretaría del Trabajo Foto: Jesús Villaseca
El titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Javier Lozano Alarcón, señaló ayer en entrevista que “no sería justo que el incremento a los salarios mínimos fuera menor al 4 por ciento”, como proponen algunas organizaciones patronales.
Entrevistado al término de una reunión de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CNSM), el funcionario apuntó que históricamente se ha fijado el incremento al mínimo con base en la inflación proyectada para el siguiente año, y en este caso los indicadores hablan de que los precios aumentarían entre 3.5 y 3.8 por ciento en 2009, pero a pesar de esto, dijo, “sería injusto no considerar lo que ha pasado este año en materia de inflación”.
Lozano manifestó que llegó ayer a hacer una “visita de cortesía” a los representantes de la CNSM; sin embargo, extraoficialmente se supo que acudió para convencer a la parte patronal de que el incremento salarial no puede ser tan bajo. No obstante, de cualquier forma 4 o 4.5 por ciento de aumento significaría un incremento real de 2 o 2.25 pesos diarios al minisalario.
De acuerdo con lo que manifestó el secretario, en 2008 nuevamente los trabajadores perdieron poder adquisitivo debido a que la inflación fue superior al 4 por ciento que se obtuvo de aumento salarial y, desde el punto de vista del gobierno, esta situación debe atenderse, por lo que no sería válido que se acordara un incremento conforme sólo a la expectativa que se tiene para 2009, sino que se debe “tratar de resarcir algo de lo perdido”.
Confió en que se tratará de llegar a un acuerdo “por consenso”, es decir, que tanto los representantes sindicales como patronales y del gobierno coincidan en el porcentaje de aumento para el próximo año, ya que esto “enviaría una buena señal”.
No obstante, insistió en que no se pueden demandar incrementos muy altos, porque “se afectaría la planta productiva y el empleo”, ya que lo que está en juego no sólo es el ingreso de los trabajadores y su poder adquisitivo, sino “la preservación de las fuentes de empleo en el país”.
Por eso es fundamental “armonizar” las posiciones de los sectores y avanzar en el resarcimiento del poder adquisitivo sólo en la medida en que se permita mantener las fuentes de empleo, ya que estirar demasiado la demanda salarial “puede poner en riesgo la viabilidad de las empresas”, por lo que ahora más que nunca se trata de “encontrar el justo medio”.
Señaló que observó un gran sentido de “responsabilidad, de conciencia compartida”, sobre la dificultad del contexto, ya que las partes están “negociando de buena fe”, y apuntó que tiene la certeza de que habrá “un buen acuerdo que nunca será suficiente para poder resarcir la deuda histórica del salario mínimo, pero que será en el sentido correcto para preservar las fuentes de trabajo”.
Además, comentó que se habló también de la posibilidad de reducir la brecha que existe entre las tres zonas económicas del país para que haya un solo salario minimo a escala nacional.
Comentó que la propuesta es que la zona A, que corresponde a los trabajadores del Distrito Federal y otras entidades del país, tendría un aumento salarial menor que los de las zonas B y C, con la finalidad de reducir la brecha entre ellas, ya que si todos aumentan igual se mantienen las diferencias y la intención es acortarlas.