Llama embajador a rechazar embestida contra la migración
El embajador de México en Washington, Arturo Sarukhán, destacó que durante 2008 se suscitó en Estados Unidos un preocupante aumento de actitudes antimigrantes, por lo que hizo un llamado a quienes creen en sociedades plurales, tolerantes y multiétnicas a reaccionar ante dicha embestida.
“Juntos debemos facilitar una participación cívica más profunda de la comunidad mexicana en Estados Unidos, que asegure su prosperidad y permita que su voz sea escuchada y su cultura celebrada en este país”, subrayó.
De manera particular insistió en lo que llamó verdad de Perogrullo, que no por ello es menos contundente y menos real: los migrantes no son y nunca han sido una amenaza para la seguridad estadunidense. Son hombres y mujeres trabajadores, cuya cultura y sólidos valores enriquecen y engrandecen a esta nación.
Los retos y el mensaje de fin de año
En un mensaje de fin de año a la comunidad mexicana en Estados Unidos, el diplomático refirió que la adversa situación económica prevista para 2009 impone el reto de reforzar las labores de protección para evitar a toda costa que se busque culpar a los migrantes de los problemas financieros del país vecino.
Más adelante expuso que se promoverá una política bilateral con Estados Unidos que entienda la migración como fenómeno que requiere ser regulado y que reclama esfuerzos de sociedad y gobierno en ambos lados de la frontera. Esta visión del gobierno de México en favor de sus comunidades en el exterior “seguirá guiando nuestra colaboración y diálogo con la futura administración del presidente electo Barack Obama”, subrayó.
Sarukhán recordó posteriormente que durante las elecciones de noviembre pasado en Estados Unidos, 9 por ciento de votantes, es decir, más de 10 millones de personas, se identificaron como latinos.
Este número es significativamente mayor que los 7.6 millones que participaron en la elección de 2004, y su sufragio fue clave en por lo menos cuatro estados “bisagra”: Colorado, Florida, Nevada y Nuevo México.
“Esa elevada participación de la comunidad latina en el proceso electoral, incluidos los mexicano-estadunidenses, fue resultado de su creciente capacidad de movilización y organización propias.
“Pero más allá de ese portentoso despliegue cívico se encuentra una importante tendencia social: el florecimiento y creciente empoderamiento de la comunidad hispana en Estados Unidos”, subrayó.
Por último, el embajador Arturo Sarukhán resaltó la importancia de que se lleve a cabo una reforma migratoria integral, para el futuro bienestar económico y social del país vecino.