■ A diferencia de otros años la gente acude a grandes tiendas, pero no compra: empleadas

Pega crisis a bolsillos; tianguis y bazares salvan regalos de Navidad

■ Descuentos hasta de 70 por ciento sobre el precio de etiqueta

■ Prevé la Canaco pérdidas por $35 mil millones a finales del año

■ Muebles, autos, juguetes y joyería, giros más afectados

Laura Gómez Flores

Pese a la guerra de promociones entre tiendas departamentales y de autoservicio para adquirir “lo que deseen” a 18 meses sin intereses, sin el cobro del impuesto al valor agregado y/o con la devolución de 30 pesos por cada 100 pesos de compra, las ventas continúan en “picada”.

La afluencia de la gente a estos lugares es creciente, pero a diferencia de otros años “no compra, únicamente pregunta o se mide lo que le gusta y sólo cuando tiene algún descuento extra lo adquiere, principalmente ropa y zapatos, pero a plazos”, comentan empleadas de dos tiendas de prestigio ubicadas en Mariano Escobedo y Moliére, respectivamente, en Polanco.

Situación similar se observa en tiendas como Cotsco y Sams, donde “sólo los más atrevidos se arriesgan a adquirir equipos electrónicos, aparatos eléctricos o cajas de vino para celebrar estas fiestas navideñas”, comentan algunas familias formadas ante las cajas registradoras, cuya fila avanza rápidamente.

“Es increíble que en estas fechas pierdas tan poco tiempo formada, cuando en años anteriores podías aventarte una hora, por lo menos, lo cual es un síntoma de que las cosas no van bien y la cuesta de enero ya se adelantó, obligándonos a muchos a comprar sólo lo necesario de la despensa y dejar para tiempos mejores la adquisición de aparatos, computadoras, teléfonos celulares y hasta perfumes”, coinciden en señalar varias amas de casa.

El paseo dominical incluye, desde hace varios años, la visita a las tiendas de autoservicio, y “si hay ofertas, mejor”, expresan Nicolás y Juan, que junto con sus esposas e hijos acudieron a una de las tres cadenas de autoservicio más importantes de la ciudad a hacer sus compras para la cena de Navidad, la cual consistirá en pavo, ensalada de manzana y sidra, porque “no hay más, y debemos apretarnos el cinturón porque empezamos el año sin trabajo”.

En el baúl de los recuerdos

La tradición de regalar en estas fechas, dicen, quedó en el “baúl de los recuerdos. La falta de un ingreso fijo nos obliga a vivir al día y eso implica no gastar de más en Navidad, pues vienen los Reyes Magos y, aunque sea pobremente y empeñando lo de valor que tenemos, los niños tendrán un juguete la mañana del 6 de enero”.

La falta de dinero, sin embargo, no impidió a cientos de familias acudir ayer domingo a alguno de los tianguis de la ciudad de México. Desde hora temprana hora el ubicado en la colonia Doctores, entre Vértiz y Eje Central, registró gran afluencia de compradores. La llegada de camiones con mercancía rebajada de Liverpool atrajo la mayor atención. Y es que comprar un juego de cubiertos en un portafolio de acero inoxidable en 500 pesos, cinco veces menos de su valor en tienda, es una ganga, afirman varios compradores.

Los descuentos en playeras, pantalones, chamarras, zapatos, y ropa de cama de marcas de prestigio con descuentos entre 50 y 70 por ciento respecto del precio que aparecía en etiqueta, fueron también “irresistibles” para muchos, quienes decidieron ajuarearse para este 24 de diciembre y “quedar bien” con los padres, la suegra, la novia o algún amigo; aunque “los más amolados” también tuvieron la oportunidad de adquirir playeras, pantalones de mezclilla o pants de entre 50 y 10 pesos la pieza.

Ni dinero ni tarjetas

“No importa que no traiga etiqueta con el precio. Parece nueva y salimos del paso”, dice Lucía, que con más de una docena de prendas en sus bolsas va en busca de un pesero que la lleve a su casa a envolver los regalos para su familia, que este año solamente le significó gastar 150 pesos, contra los mil o mil 500 pesos en tiendas de autoservicio, pero que “ahora las tengo vetadas porque no tengo dinero, ni tarjetas”, agrega.

Escenas parecidas se pudieron observar en los bazares de El Oro y Sullivan, así como en los tianguis de San Felipe y Gran Canal, donde la gente acudió no sólo a comprar sus regalos, sino la ropa para ir a trabajar presentable el próximo año, aun cuando ésta es de segunda mano. “Cuando las deudas te llegan al cuello, tienes que buscar alternativas para irla pasando y esta ropa está bien”, señala por su parte Leticia, que hasta hace unos meses trabajaba en una importante empresa de telefonía, pero un recorte de personal “me echó a la calle sin importar los años de servicio ni la experiencia adquirida, así que tenemos que ahorrar”.

El presidente de la Cámara de Comercio de la Ciudad de México (Canaco), Lorenzo Ysasi, informó que la crisis económica provocará que las ventas hacia finales del año caigan 5 por ciento respecto de 2007, lo cual significará una pérdida de 35 mil millones de pesos y 21 mil empleos temporales, siendo los giros más afectados los de muebles, automóviles, artículos suntuarios, juguetes y joyería, pese a que la gente cuenta con dinero extra por el pago del aguinaldo.