Dar libros de teatro
Ediciones El Milagro me envió otros cuatro tomos de su serie Teatro, las dos espléndidas obras de David Olguín, Casanova o la humillación que da nombre al volumen y Casanova o la fugacidad, ambas reseñadas aquí en sus respectivos estrenos, con prólogo de Esther Seligson. En la misma serie, Los diálogos frustrados, de Antonio Tabucci, que reúne los muy interesantes textos Señor Pirandello, le llaman por teléfono y El tiempo apremia, además de Marconi, si no recuerdo mal, guión radiofónico. De su serie Memorias, José Luis Ibáñez, conversaciones con Antonio Crestani, en que el maestro recrea sus tiempos de Poesía en voz alta y su trabajo con Bob Lerner, en verdaderas lecciones a los teatristas. Y en su serie El apuntador, el Manual mínimo del actor, de Darío Fo en que el Premio Nobel comparte anédotas, experiencias y consejos a los aspirantes a mimos.
La Universidad Veracruzana publicó Georg Büchner, innovador del teatro occidental, de M.Aimée Wagner y Mesa, imprescindible para estudiar a este dramaturgo, con textos y referencias desconocidos en nuestro idioma. El Fondo de Cultura editó Teatro escogido de Óscar Liera, antologado y prologado por su máximo conocedor, Armando Partida Tayzan en que se pueden encontrar Las Ubarry, La piña y la manzana, La fuerza del hombre, El gordo, La pesadilla de una noche de verano, Cúcara y Mácara, Las fábulas perversas, Repaso de indulgencias, Al pie de la letra, Bajo el silencio, Un misterioso pacto, Los negros pájaros del adiós, Las juramentaciones, La infamia, El oro de la Revolución Mexicana, El jinete de la Divina Providencia, Los caminos solos y El camino rojo a Sabaiba; la edición sinaloense de sus obras completas es inencontrable.
Editorial Porrúa y la Benemérita Universidad de Puebla se unieron para publicar Yo quiero que haya mundo, un muy documentado volumen de Patricia Rosas Lopátegui acerca de Elena Garro que incluye dos textos dramáticos acerca de la autora, pero que adolece de compartir la visión anticomunista de Garro en sus referencias a los sucesos de 1968. La Univesidad Autónoma de la Ciudad de México editó el esperado volumen que reúne los textos críticos de la inteligente Esther Seligson publicados en diferentes diarios y revistas. Libros de Godot y otras instancias dieron a conocer la recopilación de Rocío Galicia Ánimas y santones en que se encuentran Fidencio: El niño con la piedra de la virtud, de Enrique Mijares, El Tiradito. Crónica de un santo pecador, de Antonio Zúñiga y Malverde. Día de la Santa Cruz, de Alejandro Román. Esta misma casa editora publicó la versión al náhuatl de Patrick Johansson de Esperando a Godot, de Samuel Beckett con prólogo de Víctor Hugo Rascón Banda, acompañada de un disco y también en edición bilingüe, esta vez español-inglés, De poli a diva y...de regreso, de Arturo Morell.
El Premio Nacional de dramaturgia 2008 correspondió a Ignacio Padilla por su divertida e ingeniosa La teología de los fractales, editada por Conaculta y el gobierno de Baja California bajo el sello de Editorial Artificios. Del gobierno de Chihuahua llega la espléndida revista Solar y las Memorias de la inauguración del Centro Cultural Paso del Norte. Y el incansable dramaturgo, investigador y promotor duranguense Enrique Mijares publicó varios volúmenes de los que por falta de espacio solo enumeraré sus títulos: Ciudad Juárez dramaturgia y feminicidios, En la frontera norte Ciudad juárez y el teatro, Dramaturgia de Saltillo, Dramturgia de Cuernavaca, Dramatugia joven de Nuevo Laredo, Dramaturgia de Durango I y II, que reúnen textos de los talleres que Mijares ha dado en estos lugares y otros que hablan de las fronteras de México.
Desde Barcelona recibí un ejemplar de Assaig de Teatre, la revista de la Asociación de Experimentación Teatral que dirige Ricard Salvat, un grueso volumen dedicado casi por completo a la Muestra Nacional de Teatro que se llevó a cabo en Zacatecas. Y no un libro, sino alguno de los 17 discos que Mario Iván Martínez dedica a los niños bajo el rubro de Un rato para imaginar, puede ser un estupendo regalo de día de Reyes.