Exigen sanción contra médicos de la Marina
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) encontró que médicos y personal de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) violaron los derechos a la vida, la protección a la salud y la atención médica adecuada en perjuicio de Micaela Martínez López, quien perdió la vida debido a un mal diagnóstico, por lo que emitió una recomendación al titular de la dependencia, Francisco Saynez Mendoza, con el fin de que se sancione a los responsables y se repare el daño a los deudos de la víctima.
Tras las investigaciones, el organismo, presidido por José Luis Soberanes Fernández, encontró que médicos de la dependencia trataron el problema de la agraviada como probable migraña y trastorno de somatización, “cuando el padecimiento era inflamación del cerebro y meninges”, lo que, aun cuando no era mortal, provocó la muerte de la mujer, debido al mal diagnóstico.
En el documento, el ombudsman señala que familiares de la fallecida solicitaron la intervención de la CNDH en mayo de 2008, luego de que personal de la Semar se deslindó con el argumento de que el deceso no ocurrió en actos de servicio.
La víctima reportó los primeros síntomas del padecimiento a finales de enero de 2007; sin embargo, los médicos “le decían que su enfermedad era sicológica” y su muerte ocurrió el 13 de marzo del mismo año. En primera instancia la paciente acudió al Hospital Naval de Salina Cruz, Oaxaca, donde se le diagnosticó desde cefalea frontal hasta migraña y un trastorno de somatización. Aunque se determinó enviarla a neurología del Hospital Naval de Veracruz (HNV), el traslado nunca se efectuó.
Ante ello la paciente se trasladó al HNV, adonde ingresó con diagnóstico de cefalea y parálisis del sexto par craneal derecho. Además se ordenó su traslado al CMN, pues también presentó salmonelosis. En ese nosocomio se le evaluó una probable encefalitis viral y permaneció internada hasta el 13 de marzo de 2007, cuando falleció.
La CNDH afirma que las evidencias “permiten determinar que existió retraso en el tratamiento que requería la agraviada, a quien se debió trasladar de inmediato al CMN, ya que cualquier inflamación en meninges de más de dos semanas puede tener causas infecciosas, por lo que se requerían tomografía, resonancia magnética y análisis especializados”.
Ningún estudio se le practicó, “pues no fue valorada de forma adecuada y el tratamiento se redujo a una probable migraña o trastorno de somatización, minimizando la sintomatología”.