■ Agrava el panorama la crisis económica, señalan senadores
Proyecta el PRD mejorar leyes sobre seguridad, pero sin afectar derechos
Durante el último tramo del año los niveles de inseguridad en el país han crecido como nunca, a tal grado que el número de ejecutados es mayor que en las zonas de conflictos bélicos. Por ello, en 2009 continuarán las modificaciones para perfeccionar el marco jurídico, pero sin crear un Estado policiaco ni recortar garantías individuales, se asegura en un documento del grupo del PRD en el Senado.
En el mismo se advierte que la infiltración del crimen organizado en las corporaciones policiacas alcanza los niveles más altos que se recuerde y, en el marco de la crisis económica y social, se agrava más aún la violencia e inseguridad en todo el territorio.
Ante ese contexto, “la sociedad reclama acciones inmediatas y contundentes y muestra desesperación ante la enorme impunidad con que actúa la delincuencia”, agregan los perredistas.
La situación, reconocen, reclama medidas urgentes, “pero sin olvidar que detrás del problema de la delincuencia hay una debilidad de las instituciones del Estado para enfrentarlo y hay también graves problemas económicos y sociales que incuban las condiciones del crecimiento del crimen y un contexto cultural favorable a la delincuencia, que no ha sido identificado como un riesgo latente”.
Por ello, en 2009 los senadores del PRD “continuarán proponiendo medidas que mejoren la efectividad de los programas para contener y atacar la delincuencia, pero seguirán insistiendo en que se requieren políticas integrales, incluidas educativas y culturales, que atiendan el problema en la dimensión en que se ha generalizado”.
La bancada perredista participará en las negociaciones para modificar las leyes pendientes en materia de justicia, pero con la idea muy clara de que “generar un Estado policiaco, recortar garantías individuales o proponer mayores penas, incluso la de muerte, no es la solución, pues la delincuencia y la impunidad son sólo consecuencias de un sistema económico que ha excluido a grandes sectores de la población y de una creciente corrupción, que ha corroído a muchos niveles del Estado mexicano”.
En ese documento, donde se hace un balance de lo logrado en el pasado periodo de sesiones, los senadores del PRD resaltan que en materia de combate a las bandas criminales se reformó el artículo 73 constitucional para otorgar al Congreso la facultad de legislar en materia de secuestro; se expidió la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública y se aprobó la llamada “miscelánea penal”, que incluyó modificaciones a 10 ordenamientos en esa materia.
Por lo que toca a las dos reformas propuestas por Felipe Calderón que quedaron pendientes, la de narconemudeo y la Ley de Extinción de Dominio, el senador Ricardo Monreal comentó que no se aprobaron porque contienen elementos violatorios de derechos humanos.
Por lo que toca al narcomenudeo, dijo, es una ley que proviene del pasado sexenio, cuando el entonces presidente Fox la vetó, “por presiones de Estados Unidos”, que luego Calderón retomó “con un enfoque aún peor “, toda vez que “propone en los hechos penalizar el consumo de drogas y poner a los jóvenes adictos en la disyuntiva de ir a la cárcel o a centros de desintoxicación, sólo que éstos no existen”.
El narcomenudeo requiere por ello de un análisis profundo, a fin de dar cuerpo a una legislación que incluya medidas para sancionar y erradicar la venta de drogas, pero sin criminalizar a los jóvenes, ni empujarlos, por ejemplo, a una mayor adicción al mandarlos a prisión, donde el peligro de que se conviertan en drogadictos es aún más grave, resaltó Monreal.