Asueto decembrino, sorpresas citadinas
■ Escritores abren local que da consultas sobre hábitos de lectura
“Biblioterapia”, nueva medicina contra el estrés en Gran Bretaña
Londres. Quienes se sienten abrumados por las presiones de la vida moderna tienen ayuda a la mano, en una forma consagrada por el tiempo: los libros. Un grupo de escritores, entre ellos Alain de Botton, ha abierto en Bloomsbury, el corazón literario de Londres, un establecimiento que ofrece soluciones terapéuticas a pacientes estresados.
Si bien no habrá más de 55 títulos a la vez, ofrecen “prescripciones” para una forma de vida más satisfactoria y menos extenuante. Cierto, puede parecer un poco New Age, pero es una empresa seria, con nombres importantes de respaldo y un compromiso de atender los problemas de las personas.
En oferta en la Escuela de Vida: libros, obras de arte, excursiones, cursos, comida, sermones, y lo más popular de todo: “biblioterapia”. Dividido en planta baja y sótano, el edificio ofrece un santuario en el que los visitantes pueden leer, relajarse y pensar sin ser perturbados.
El establecimiento fue idea de Sophie Howarth, de 33 años, ex curadora de programas públicos de la galería Tate Modern. Lo instaló con donaciones privadas, luego de llegar a la conclusión de que un sector cultural “pedante” había dado la espalda a la promoción del desarrollo personal.
“Me frustró la negativa del mundo de la cultura a atender los problemas cotidianos –explicó–.
“Las personas que vienen aquí quieren profundizar sobre temas en los que piensan todo el tiempo, desde su trabajo hasta su familia. El problema con el mundo de la cultura es que en realidad no habla a las personas sobre esos asuntos.”
La librería, que Howarth describe como una “botica cultural”, está adornada con un sofá de piel de leopardo que parece incongruente con el diseño minimalista. Una pequeña puerta al fondo conduce a un aula subterránea con sofás de cuero rojo, una cortina de terciopelo y un mural en blanco y negro de la artista Charlotte Mann, que representa la vida cotidiana. Allí, pensadores profesionales conviven con alumnos en torno a una mesa redonda en cursos vespertinos y de fin de semana que abarcan cinco campos: trabajo, juego, familia, política y amor.
“Cajas de regalo intelectual”
Junto con De Botton participa en el proyecto Robert Mcfarlane, académico de Cambridge. Obras de ambos autores aparecen en el catálogo de la planta alta. También hay volúmenes del sicólogo Oliver James (They fuck you up: how to survive family life, Te joden todito: cómo sobrevivir a la vida familiar), Mark Vernon (After atheism, Después del ateísmo), el novelista Julian Barnes y el filósofo Simon Critchley. Yoga for people who can’t be bothered to do it (Yoga para personas a quienes no se puede molestar para hacerlo), de Geoff Dyer, aparece en forma prominente, junto con In defence of politics (En defensa de la política), de Bernard Crick. Repartidas en todos los anaqueles hay citas de la serie Grandes Ideas de la editorial Penguin.
Macfarlane tuvo una intervención esencial en el diseño de la “caja de regalo intelectual”, que se vende en 50 libras (unos 100 dólares). Los clientes que se acercan al personal con una lista de preocupaciones reciben una caja con seis títulos escogidos por Macfarlane, junto con un folleto que explica las elecciones.
Sin embargo, la oferta más interesante son las excursiones de fin de semana. De Botton, quien seis años antes publicó The art of travel (El arte de viajar), lleva a los clientes a Heathrow, donde les espera una visita guiada de la nueva terminal aérea, conocen a los maleteros y platican con los rastreadores de vuelos, todo por 250 libras (unos 500 dólares).
Otro paseo incluye un recorrido por “la gran institución pavimentada” de la autopista M1 (Londres-Leeds) y promete encuentros con “arquitectos, historiadores, artistas y traileros”.
Entre tanto, la escritora Susan Elderkin, quien funge como biblioterapeuta residente, ofrece a los clientes un programa de cinco meses de consultas regulares por teléfono o correo electrónico acerca de sus hábitos de lectura por 50 libras (unos 100 dólares).
El festival inaugural de la Escuela de Vida tendrá lugar este fin de semana. Por 500 libras (unos mil dólares), los alumnos podrán “entrar a su propio riesgo en la obra de Martin Parr”, en un viaje a la isla de Wight. El laureado fotógrafo, promete la escuela, “adiestrará sus ojos para que vean la fealdad de la belleza y el horror del ocio”.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya