■ De nada sirvieron exhortos de integrantes de todas las bancadas para frenar incrementos
Cobro de luz evidencia trato privilegiado del Ejecutivo a empresarios, aseguran senadores
■ “Lo que está en juego es la viabilidad de numerosas actividades económicas”, advierte el tricolor
Ampliar la imagen El tricolor señala que creció la irritación social por el incremento a las tarifas de luz Foto: Alfredo Domínguez
Ampliar la imagen Los adultos mayores, uno de los sectores más castigados por el alza en la energía eléctrica Foto: Guillermo Sologuren
Contrario a las promesas vertidas durante la campaña electoral de 2006, los precios de la energía eléctrica y los combustibles han mantenido su tendencia a la alza, lo que ha influido en que haya una inflación superior a 8 por ciento en lo que va de la presente administración, lamentaron legisladores de PRI y PRD.
Condenaron la falta de sensibilidad política del gobierno calderonista al reducir únicamente las tarifas de energía eléctrica a grandes empresas, y seguir con la tendencia de aumentar el servicio al consumo doméstico.
Para el senador Ricardo Monreal, “se trata de un triste regalo de mala fe contra las clases populares, con el que se corona la serie de golpes arteros con los que el gobierno de Felipe Calderón ha evidenciado su desinterés por la mayoría de los mexicanos y el trato privilegiado que le ha dado a quienes lo ayudaron a robarse la Presidencia de la República”.
Legisladores mencionan que sólo en el último periodo ordinario de sesiones prácticamente todas las bancadas representadas en el Senado, incluida la del PAN, presentaron 185 exhortos, puntos de acuerdo e iniciativas para detener los incrementos al servicio de energía eléctrica y combustibles.
Inclusive demandaron que se “considere en las metodologías para establecer las tarifas de luz para uso doméstico, los impactos a la sustentabilidad del desarrollo social, el cuidado del medio ambiente y de salud pública en los estados generadores de electricidad”, como fue el caso del punto de acuerdo presentado en tribuna por la senadora panista Martha Leticia Sosa Govea.
Sin embargo, insiste Monreal, este anuncio de que bajarán las tarifas de luz a los industriales, trasladando así los subsidios a los grandes consumidores, “es una nueva demostración de que Calderón es rehén de los intereses que lo llevaron a robarse la Presidencia. Para ellos, la prioridad es la gente que ostenta el poder económico, mientras que la situación en el campo o la de usuarios de colonias pobres les tiene sin cuidado”.
Lo grave, apuntó, “es que la gente tampoco reacciona ante este tipo de engaños, es kafkiano lo que está sucediendo en el país”.
La bancada del PRI, en tanto, destacó que el senador Mario López Valdez condenó el desinterés del gobierno de Felipe Calderón ante los insistentes llamados a detener las alzas. Enfatizó que los pagos por el consumo de energía eléctrica en Sinaloa, por ejemplo, se dispararon casi al triple, una vez concluido el horario de verano, ya que el importe subvencionado era de 80 centavos a un peso por kilovatio hora, debiendo regresar la tarifa a 2.30 pesos.
Señala que aún cuando la Comisión Federal de Electricidad ha manifestado que no ha habido aumentos en el consumo de electricidad, la realidad es que todos los usuarios se han visto notablemente afectados, esto a pesar de las recomendaciones que la paraestatal ha publicado para racionalizar el consumo de la energía eléctrica.
Añadió que como consecuencia de los incrementos en las tarifas eléctricas se ha producido un fenómeno de irritación entre la sociedad, que ha desembocado en algunos conflictos que podrían traer consigo problemas mayores: grupos que se niegan a pagar los consumos que consideran injustificados, oficinas abarrotadas de personas que reclaman el contenido de los estados de cuenta e, incluso, empleados que, al presentarse en los domicilios particulares para entregar los recibos son increpados por vecinos que no hallan la manera de canalizar su inconformidad.
La bancada del tricolor consideró necesario que, más allá de los cálculos económicos realizados en las oficinas gubernamentales, las autoridades federales aborden el problema del consumo de los energéticos desde una postura con mayor sensibilidad social, ya que lo que está en juego es la viabilidad de numerosas actividades económicas y el bienestar de millones de familias que han visto mermados sus ingresos a causa de la escalada inflacionaria registrada durante los meses recientes, situación que, de conformidad con las proyecciones realizadas, no parece que vaya a mejorar a corto plazo.
En el mismo sentido el senador priísta Adolfo Toledo Infanzón señaló que desde comienzos del presente año las tarifas de luz han sufrido aumentos considerables, alcanzando casi un 60 por ciento de incremento, lo que coloca a México como uno de los países con los costos más caros de energía eléctrica en el mundo.
Puntualizó que el mismo Informe de gobierno del presidente Felipe Calderón señala que entre enero y julio de 2008 el costo del gas natural registró un aumento de 40.6 por ciento respecto del mismo periodo del año anterior, al pasar de 2 mil 979 pesos el metro cúbico a 4 mil 372 pesos, lo que provocó un alza en los costos de generación eléctrica.