Teme el episcopado que crezca la pobreza
La desigualdad y la pobreza son los desafíos más importantes que enfrenta el país, situación que puede agravarse aún más ante las difíciles perspectivas que se presentan para 2009 en inflación, crecimiento económico y generación de empleos, señaló la Comisión de Pastoral Social del Episcopado Mexicano. En un análisis sobre la realidad nacional, esta instancia de la Iglesia católica consideró que esta situación que vive más de la mitad de los mexicanos se plantea como una urgencia moralmente inaplazable, pues se habla de derechos sociales básicos, como alimentación, educación, vivienda, empleo y seguridad social, sin los cuales no se puede garantizar el derecho a una vida digna. Para la Iglesia, la desigualdad social, donde unos pocos poseen niveles hasta insultantes, mientras millones carecen de lo indispensable, sólo tiene una explicación posible: la desigual concentración de la riqueza y su injusta distribución. “Constatar que las mismas condiciones que acentúan la pobreza acarrean un acelerado progreso de degradación social también es escandaloso, pues los pobres no sólo se ven privados de sus derechos básicos, sino que se ven orillados a sobrevivir en los márgenes de la sociedad”, dice el análisis titulado El anhelo de la paz, la vida digna y los derechos humanos en México, recientemente presentado por la jerarquía eclesiástica.