■ Desde hace años no era más que un membrete; resultados, en 2009
Restructurar la Compañía Nacional de Teatro, cometido de Luis de Tavira
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El maestro Luis de Tavira. Imagen de archivo
Foto: Cristina Rodríguez
Durante 2008 en el ámbito teatral mexicano destacó la restructuración de la Compañía Nacional de Teatro (CNT), luego de casi un año de no contar con un director.
El INBA designó al creador escénico Luis de Tavira para encabezar la agrupación escénica más importante del país, la cual, de acuerdo con su nuevo titular, “desde hace años sólo era un membrete”.
La CNT inició así sus actividades con un subsidio de 18 millones de pesos y con el compromiso de dar sueldo a sus integrantes y crear residencias artísticas, así como plazas para actores eméritos.
Le ha tomado otro año organizarse y concretar el proyecto, tiempo planteado por el propio De Tavira, por lo que se esperan en 2009 los primeros resultados.
Por otra parte, a finales de 2007 y principios de 2008 se agudizó el conflicto entre el Instituto Cultural Hélenico y el Centro Cultural Hélenico, razón por la cual la comunidad teatral, así como diputados de la Comisión de Cultura, de la Cámara de Diputados, demandaron que se derogara el decreto de propiedad otorgado a dicho instituto.
Pero sin que el CNCA emitiera un comunicado oficial pese a la importancia del conflicto, ambas instituciones llegaron a un acuerdo (La Jornada, 17/5/08).
Otro cambio de directores ocurrió en la Universidad Naciona Autónoma de México: se designó a Enrique Singer como titular de la Dirección de Teatro, en sustitución de Mónica Raya, de quien en su momento se dijo que buscaba la dirección del Centro Universitario de Teatro (CUT), espacio académico para el que finalmente fue elegido Mario Espinosa, anterior titular del Fonca y coordinador de los teatros del Gobierno del Distrito Federal.
Antonio Crestani, quien se desempeñaba como director del CUT, paso a ser el titular del Centro Cultural Hélenico, y el dramaturgo Jaime Chabaud, director de la revista Paso de Gato, se fue a coordinar el Departamento de Artes Escénicas y el teatro Casa de la Paz de la Universidad Autónoma Metropolitana.
También el presidente del Consejo Nacional Para la Cultura y las Artes (CNCA), Sergio Vela, hizo ajustes en su equipo de colaboradores, y fue polémica la llegada de Gerardo Kleinburg como director del Festival Internacional Cervantino. El funcionario había estado poco tiempo al frente, primero, de la Dirección de Literatura de la UNAM, y luego como coordinador de la programación internacional del CNCA.
Mención especial merecen los montajes de las nuevas generaciones de dramaturgos como Ximena Escalante, Edgar Chías, Luis Enrique Gutiérrez Ortiz Monasterio (Legom), Enrique Olmos y Noé Morales, así como la realización de una diversidad de proyectos de las distintas compañías independientes, tanto del teatro dirigido a los pequeños (obras de Berta Hiriart, Amaranta Leyva, Marilú Carrasco, Giovanna Cavasola, Lourdes Pérez Gay y Lucio Espíndola), como del orientado al disfrute de los mayores. En 2008 la comunidad teatral despidió a dos de los más importantes dramaturgos mexicanos: Emilio Carballido y Víctor Hugo Rascón Banda.