■ Montemayor, Alatriste y Cossío, en homenaje al autor en Bellas Artes
Evocan el humanismo de la literatura de Juan Bosch
El escritor y político dominicano Juan Bosch, a 100 años de su nacimiento, fue recordado como precursor del cuento latinoamericano y humanista destacado. “A pesar de las circunstancias adversas, dedicó su vida a defender sus ideales y a contar historias”.
El embajador de República Dominicana en México, Pablo Maríñez, y los escritores Carlos Montemayor, Sealtiel Alatriste y Miguel Cossío Woodward participaron ayer en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes en el homenaje al dominicano que luchó en contra de Rafael Trujillo, y en 1963 se convirtió en presidente.
“Juan Bosch representa el más grande pensador político, intelectual y humanista que ha tenido el país”, expresó el embajador Pablo Maríñez durante su intervención.
El autor, nacido en La Vega, República Dominicana, en 1909, publicó su primer libro de cuentos, Camino real, en la década de los 30; el ensayo Indiso, y más tarde su primera novela, La mañosa. Fundó y dirigió la página literaria de Listín Diario, donde reflejó sus dotes de crítico de arte y literatura.
Montemayor señaló: “Estamos ante uno de los cuentistas más importantes de todas las épocas. Me recuerda mucho a Antón Chéjov, por los inicios en sus textos. Todos los cuentos inician de manera inesperada, y esta experiencia notable está relacionada con la historia y la secuencia del final”.
Explicó que esta técnica, que parece espontánea, requiere de gran concentración del autor. Asimismo, resaltó la fuerza del idioma en los cuentos: “el lenguaje es uno de los grandes personajes de sus relatos”.
Montemayor señaló que en la obra de Bosch destaca su interés en la tragedia humana, la soledad, las condiciones sociales de América Latina, pero también en los animales. “Dice la sabiduría popular que los perros ven lo que no pueden ver los hombres. En uno de sus cuentos, un perro ve la presencia de la muerte y lucha contra ella, porque quiere a su amo”.
Para el escritor, la capacidad de Bosch de ver el mundo animal lo muestra como un autor que va más allá de una narración panfletaria.
Otro aspecto que encontró Montemayor en los cuentos de Bosch es la descripción que realiza sobre el Caribe: “me hace sentir en esa otra naturalidad de la naturaleza”.
El narrador y crítico cubano Miguel Cossío señaló que Bosch fue un hombre comprometido con los ideales y la justicia social, ya que supo siempre que la literatura no es propaganda, sino arte. Explicó que la narración tiene que penetrar el sufrimiento humano, pero hasta el dolor debe ser bello.
El escritor y editor Sealtiel Alatriste indicó que, “como afirmó en su momento el escritor nicaragüense Sergio Ramírez, la prosa de Bosch, precisa y brillante, así como su dominio de las reglas del relato corto, lo revelan como maestro del oficio”.