■ El ataque, reacción del grupo armado a anulación de candidaturas en el País Vasco: gobierno español
Atentado de Eta en Madrid deja cuantiosos daños materiales
Madrid, 9 de febrero. Un coche bomba explotó en Madrid sin causar heridos pero sí cuantiosos daños materiales, en el primer ataque efectuado en la capital española por la organización armada vasca ETA desde 2006.
Para el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, el atentado ratifica la decisión tomada ayer por el Tribunal Supremo de anular las candidaturas de las formaciones independentitas D3M y Askatasuna para los comicios del primero de marzo en el País Vasco.
La deflagación se produjo a las 9 horas locales, una hora y media después de que llamadas anóminas alertaron a la Cruz Roja, los servicios sanitarios de urgencia y a los bomberos sobre la colocación de un coche bomba en el Campo de las Naciones de Madrid –importante zona de negocios–, cerca del edificio de la empresa Ferrovial, vinculada a la construcción de un tren de alta velocidad en el País Vasco, uno de los objetivos declarados de ETA.
La policía española desplegó de inmediato un operativo de desalojo que evitó pérdidas de vidas humanas, aunque provocó severas afectaciones a algunos edificios y 50 vehículos quedaron calcinados.
Rubalcaba interpretó el atentado como una reacción de ETA a la decisión adoptada anoche por el Tribunal Supremo de anular las candidaturas de D3M (Democracia Tres Millones) y de Askatasuna, por su presunta relación con el grupo armado.
“Esta será la primera vez en que no habrá ningún partido político afín a la izquierda separatista radical que simpatiza con el ideario de ETA en los comicios regionales”, dijo.
“Los violentos y quienes los apoyan tiene cada vez el camino más entrecho. No hay ningíun futuro. Saben que cada vez son más débiles”, declaró el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, al condenar al ataque y asegurar que quienes lo cometieron serán puestos ante la justicia.
Los partidos políticos y las instituciones también repudiaron de forma enérgica el ataque. “Lo único que puedo decir a ETA es que desaparezca de una vez y para siempre de nuestras vidas”, expresó Juan José Ibarretxe, el jefe de gobierno regional vasco.