■ Algunos creadores toman poses de intelectualidad que alejan al público: Marcela Rodríguez
“Existe mucha pretensión en la música contemporánea”
■ “Estoy convencida de que no tiene que entenderse, se tiene que disfrutar”, expresa en entrevista
■ Organizó un encuentro que restablecerá los lazos del arte sonoro entre México y España
Ampliar la imagen Puentes: Nuevo Festival Hispano-Mexicano de Música Contemporánea se inaugurará el 17 de febrero y concluirá el 28 del mismo mes. El proyecto pretende restituir la interacción entre ambas naciones, que concluyó en 1983 Foto: Cristina Rodríguez
Cómo será de complejo el panorama que deben enfrentar hoy día los compositores de música de concierto que a veces les cuesta más trabajo estrenar una obra que escribirla.
De ello da cuenta la compositora Marcela Rodríguez, quien admite que, en parte, esa situación se debe a los creadores, luego de que algunos adoptan cierta “pose de intelectualidad” en su trabajo, lo cual termina por alejar a intérpretes y público.
“Quieren decir cosas que finalmente no logran decir, por la pretensión de escribir de manera complicada. Claro que existen muchas partituras, complejas, pero agradables al oído; pero otras, de plano no”, agrega.
“Hay mucha pretensión dentro de la música contemporánea. Pienso que, a veces, nosotros le hacemos el harakiri a nuestra música. Aunque eso depende de cada compositor.
“En mi caso, me gusta mucho que llegue el mensaje a la gente, que no tenga que saber nada de música para poder disfrutarla. Estoy convencida de que la música no debe entenderse, se tiene que disfrutar.”
Dos son los meses que han transcurrido sin que Marcela Rodríguez haya podido escribir una sola nota, no obstante se define como compositora compulsiva, que necesita hacer música a diario.
Rencuentro sonoro
El único motivo es que durante ese tiempo ha dedicado la totalidad de su atención y energía a preparar una iniciativa mediante la que busca recuperar los nexos entre México y España en el terreno del arte sonoro.
Se trata de Puentes: Nuevo Festival Hispano-Mexicano de Música Contemporánea, el cual tendrá lugar del 17 al 28 de febrero en el Centro Nacional de las Artes y ARTeria México, con la participación de cerca de medio centenar de compositores, intérpretes y poetas.
Este encuentro restituye la conexión que se interrumpió entre ambas naciones desde que se canceló el Festival Hispano Mexicano, organizado de 1973 a 1983 por la fallecida compositora y pianista mexicana Alicia Urreta y el músico español Carlos Cruz de Castro, quien, por cierto, esta ocasión será uno de los conferenciantes.
Además de clases maestras, mesas redondas y conferencias, las actividades incluyen siete conciertos, con programas integrados por música nacional y española de autores vivos, cuya edad fluctúa entre los 30 y 55 años, y en los cuales podrá escucharse música de cámara, tríos, obras para piano y electroacústica.
En ellos intervendrán intérpretes de aquel país y del nuestro. Entre los primeros se encuentran los pianistas Carlos Apellaniz y Alberto Rosado, mientras entre los segundos, el flautista Horacio Franco, el guitarrista Pablo Gómez, el violista Omar Hernández y el ensamble Onix.
Los poetas, en tanto, son Fabio Morabito, David Huerta, Alicia García Bergua, Luis Felipe Fabre, Pedro Serrano, Luigi Amara, Miriam Moscona y Hernán Bravo, que leerán su obra como parte de los conciertos.
De acuerdo con Marcela Rodríguez, el festival permitirá advertir el alto nivel que mantiene hoy día la música ibérica y constatar el buen momento por el que atraviesa la que se realiza en nuestro país, así como tender lazos entre creadores e intérpretes de ambas naciones.
A su decir, la composición se distingue hoy a escala mundial por su condición universal y por una profusa individualidad que permite la existencia de un amplio eclecticismo de voces, lenguajes, estilos y técnicas.
Prejuicios contra el género
Considera que si bien actualmente existe en México mayor sensibilidad hacia la música contemporánea, todavía es mucho lo que debe hacerse y trabajar en pro de ella, debido a que es una vertiente que no fluye con la naturalidad que debiera.
“No es natural, como debería serlo. En otras épocas, como la de Bach, Mozart o Beethoven, se tocaba sólo música contemporánea; en cambio, en nuestro caso, debemos luchar mucho para que toquen lo que escribimos. A veces cuesta más trabajo estrenar nuestras obras que escribirlas”, señala.
“Sí requiere mucho esfuerzo hacer música contemporánea: hay que estar encima de quienes deciden y programan, como también de los que tienen dinero, para que apoyen. Se hacen varios esfuerzos, pero generalmente son individuales. Hace falta planeación y una política, pero no es un fenómeno exclusivo de nuestro país, sino que prevalece en todo el mundo.”
Aunque está convencida de que no existe desdén hacia las obras de reciente creación, la compositora considera que, en el fondo, la gente todavía manifiesta cierto miedo o flojera hacia ellas, porque las considera raras o incomprensibles.
“Este tipo de música tiene muchos estigmas sobre sí. Se cree que es inintelegible, rara, muy intelectual, imposible, pero lo que rara vez se advierte es que existen tantas técnicas como número de compositores. Me encanta la pluralidad que prevalece hoy día en la música y que no tengamos reglas, como sí ocurría en el romanticismo, el barroco o el clasicismo.”
La inauguración de la primera versión de Puentes: Nuevo Festival Hispano-Mexicano de Música Contemporánea tendrá lugar el martes 17 de febrero a las 19:30 horas, con la conferencia Antiguo y nuevo festival Hispano-mexicano, a cargo de Carlos Cruz de Castro, en la Sala Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes.
Al término, en ese mismo lugar, el ensamble Onix, dirigido por José Luis Castillo, ofrecerá el primer concierto, integrado por obras de César Camarero, Georgina Derbez, Hebert Vázquez, José Manuel López López y Marcela Rodríguez; además, el poeta Fabio Morabito leerá parte de su obra. La entrada es libre.