México ocupa uno de los más altos lugares en el mundo en consumo de alcohol por habitante, junto con Brasil y Argentina, alertó Roy Rojas, asesor internacional en seguridad vial de la Organización Panamericana de la Salud, en breve entrevista durante la primera Reunión Nacional de Expertos en Alcoholimetría, organizada por el Centro Nacional para la Prevención de Accidentes (Cenapra) de la Secretaría de Salud.

A su vez, Nelly Davison, asesor del Cenapra, apuntó que los participantes en esa reunión intercambiarán experiencias y diseñarán un manual único de alcoholimetría para el territorio nacional, con el fin de tener un solo parámetro en torno al nivel de tolerancia máximo de alcohol en la sangre en los conductores.

Hay resultados exitosos

No inventaremos el hilo negro; es sólo culturizar a los conductores para evitar accidentes. En Sao Paulo, Brasil, hace dos meses se aplicó la ley de tolerancia cero, y los accidentes automovilísticos, suicidios y violencia doméstica se redujeron 50 por ciento; también hay resultados exitosos en Chile y en Cali, Colombia, abundó.

“En el país no se parte de cero. En la ciudad de México, León y Chihuahua se ha mostrado el éxito del programa del alcoholímetro; el reto es tener un programa multisectorial y una norma nacional. Aquí los expertos están definiendo los productos apropiados para el país. Para el caso de los conductores de transporte público y de personal, es de cero tolerancia”, aseveraron ambos.

Roy Rojas explicó que el nivel internacional aceptado de alcohol es de 0.5 grados por litro de sangre, pero se trata de que en México los accidentes viales, la violencia doméstica y suicidios derivados de su consumo se consideren problema de salud pública y se apliquen sanciones más rigurosas.

El propósito, agregó, es que el conductor sienta que lo que hace puede generar muertes y lesiones a otras personas.

No hacemos esto para molestar a la población, sino para salvar vidas, porque la primera causa de muerte entre los jóvenes de 14 a 29 años de edad es el consumo de alcohol, expresó Nelly Davison.

Ambos explicaron que, de acuerdo con un estudio que se realizó entre mayo y junio del año pasado, unos 200 mil conductores de la ciudad de México menejan bajo influencia del alcohol los fines de semana.

Por eso urgen soluciones multisectoriales, aunque por el momento no se contemplan restricciones publicitarias; el enfoque está orientado a la elaboración del manual único, ya que aún no estamos en la etapa de una ley sobre el consumo de alcohol, expusieron.