París, 18 de febrero. El presidente francés Nicolás Sarkozy dio a conocer este miércoles propuestas de rebaja de impuestos y beneficios sociales hasta por 3 mil 300 millones de dólares para ayudar a las familias francesas a enfrentar la crisis económica.

El paquete de medidas sociales fue develado en una reunión con líderes sindicales en el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia, dos semanas después de que entre uno y 2.5 millones de personas se manifestaran en toda Francia contra la política del gobierno.

El costo total para el Estado de mis propuestas sería de entre 2 mil 75 y 3 mil 300 millones de dólares, dijo el mandatario francés en la reunión.

El presidente francés llamó a tomar el único camino que vale contra la crisis, el del esfuerzo, el de la justicia y el del rechazo de la facilidad y de los errores del pasado, durante una intervención televisada posterior a la reunión.

La presión sobre el gobierno es fuerte, ya que la mayoría de franceses estiman que las medidas anticrisis no van en esa dirección.

Sarkozy también dijo apoyar la iniciativa de uno de los sindicatos presentes en el encuentro para crear un fondo de 3 mil 700 millones de dólares para nuevas formaciones laborales, la mitad del cual será financiado por el Estado.

Sin embargo, los sindicatos consideran que el paquete de medidas es insuficiente y se mostraron decepcionados por la ausencia de medidas en los salarios.

Al salir de la reunión, los sindicatos se manifestaron decididos a concretar el 19 de marzo una nueva jornada de movilización contra la carestía, por un mayor poder adquisitivo y en defensa del empleo.

Sarkozy se mostró a favor de aumentar los beneficios para los trabajadores en desempleo parcial y presentó varias opciones de rebajas impositivas para que sean consideradas por los sindicatos.

Otras medidas propuestas incluyen una asignación de 500 a 600 dólares para los desempleados, y extender un esquema de cupones para pagar por el cuidado de niños, ayuda doméstica y estudios en casa.

El presidente francés hizo estos anuncios en momentos que enfrenta la crítica de 57 por ciento de los franceses, según los últimos sondeos, y un clima social particularmente tenso.

Esta situación se ha venido agravando por una huelga general en las Antillas francesas, que derivó en enfrentamientos violentos, que dejaron un muerto en la isla de Guadalupe durante la noche del martes.

La agitación en Guadalupe, prácticamente paralizada desde el 20 de enero, y en la vecina Martinica, en huelga general desde hace dos semanas, podría también extenderse a la Reunión, otro departamento francés en el Océano Índico.

En numerosos sectores existe el temor de que esta agitación en los departamentos de ultramar se extienda a Francia, donde el gobierno está en conflicto con el mundo universitario.

Francia está confrontada a una crisis económica de una amplitud inédita, que provoca la inquietud legítima de los franceses, declaró Sarkozy. La situación es seria, pero salimos mejor y saldremos mejor que otros países.