La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) denunció ante la Procuraduría General de la República (PGR) a la ex subsecretaria Purificación Carpinteyro Calderón, como presunta responsable de haber intervenido las líneas telefónicas del secretario Luis Téllez, así como de la divulgación de las grabaciones.

Por separado, la ex funcionaria señaló que no se le ha notificado de forma oficial la acusación, que no grabó ni divulgó las conversaciones, pero que sí las conocía, debido a que el presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), Héctor Osuna, se las entregó. Ella, a su vez, las llevó al presidente Felipe Calderón y por instrucción de éste las entregó al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont.

Por la noche, Gobernación informó que efectivamente la licenciada Purificación Carpinteyro entregó en mano al secretario Fernando Gómez Mont un disco compacto que contiene conversaciones telefónicas de carácter privado atribuidas al señor Luis Téllez.

Ya estudian las grabaciones

Gobernación aseveró que el material señalado es sometido a los estudios periciales correspondientes para determinar su origen y contenido, analizar la legalidad de su procedencia, así como la posesión y divulgación que hizo Carpinteyro, ex subsecretaria de Comunicaciones y Transportes, quien renunció al cargo aludiendo diferencias con el titular de esa dependencia.

La denuncia en contra de Purificación Carpinteyro se presentó después de que Luis Téllez dijo haber recibido un mensaje con un nuevo intento de extorsión, y la advertencia de que deberá renunciar al cargo antes de que su vida se convierta en un verdadero escándalo.

Asimismo, trascendió que la SCT habría presentado tres denuncias ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) para que se investiguen por lo menos tres irregularidades en las que presuntamente habría incurrido Carpinteyro durante su gestión en Correos de México.

En entrevista radiofónica Carpinteyro negó haber grabado y difundido las conversaciones de Téllez. Dijo que quien acusa tiene que aportar pruebas, y que una vez que se aclaren las cosas evaluará presentar una denuncia por perjuicios y daño moral.

En otra entrevista dijo que sí conocía las grabaciones, ya que el presidente de la Cofetel, Héctor Osuna, se las entregó y ella de forma institucional las llevó al presidente Felipe Calderón Hinojosa, quien le instruyó que las entregara al secretario de Gobernación.

Señaló que no se llama Esperanza (como se asegura en las denuncias presentadas por la SCT). Ha de ser un acto fallido de alguien, por lo que criticó el descuido del titular de la Unidad de Asuntos Jurídicos de la SCT, Gerardo Sánchez Henkel, al integrar la denuncia. Señaló que no tiene nada que temer, y que acudirá a declarar a la PGR en cuanto se lo soliciten, porque a menos de que fabriquen pruebas no van a poderme probar nada.

Consideró que el procedimiento iniciado en su contra es una vendetta producto de que en la SCT hay una situación en la que las frivolidades han llegado a un extremo sorprendente, con la revelación de las grabaciones de Diana Pando, la exhibición del secretario en una conferencia en la que hubiera sido preferible que no dijera nada. Me da pena formar parte de esta trama de telenovela en la que me han hecho aparecer, y calificó a Luis Téllez Kuenzler de paranoico.

El conflicto sobre la divulgación de conversaciones telefónicas entre el secretario Luis Téllez y otros funcionarios tomó un nuevo giro, cuando el titular de la Unidad Jurídica de la SCT, Sánchez Henkel, acudió el martes por la noche a la PGR a ratificar la denuncia presentada el lunes pasado contra quien resulte responsable de haber intervenido las líneas telefónicas de Téllez y difundido sus conversaciones, pero también amplió la denuncia al señalar como presunta responsable a Purificación Carpinteyro.