Lunes 23 de febrero de 2009, p. a12
La crisis económica ronda la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería (FILPM); aunque apenas han trascurrido pocos días de la fiesta editorial como para conocer datos, algunos libreros ya perciben menos ventas que el año pasado.
Durante la edición 2008 se registraron 115 mil visitantes, 4 mil menos que en 2007, pero, de manera paradójica, se habló de un aumento de 40 por ciento en las ventas de libros.
Inaugurada el pasado miércoles 18, la feria, que concluirá el primero de marzo, llegó a su primer fin de semana con el fantasma de la crisis económica, al mordisquear las cajas registradoras de los casi 500 locales rentados por las editoriales.
Por lo pronto, el pasado sábado 21 en los pasillos y locales de la feria se observó nutrida afluencia de visitantes, pero no como en ocasiones anteriores.
En el módulo de Editorial Océano, por ejemplo, el vendedor Raúl Rico reconoce que las compras de libros han estado un poco bajas
en comparación con las del año pasado, aunque aclara que este sábado comenzaron a subir
.
Puede decirse, agrega Rico, que hay 30 por ciento menos de compradores que en 2008.
Rogelio Galindo, encargado de ventas del local de la editorial Random House Mondadori, advierte que en los primeros días de la feria se ha registrado una venta igual
a la del mismo periodo del año pasado.
Pero Galindo precisa: la cifra de ahora es parecida a la de 2008, en cuanto a dinero, no respecto a la cantidad de libros, que se han vendido menos, pese a que ahora trajimos más novedades
.
La complejidad se confirma con el punto de vista de Fernando Macotela, director de la FILPM, quien comenta a La Jornada que observa que el número de asistentes, hasta el viernes, prácticamente es el mismo que el del año pasado
.
Macotela informa que el próximo fin de semana la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana aplicará una encuesta entre los editores para tener cifras concretas de si la crisis económica ha afectado las ventas en la feria.
Si uno se para en la puerta se percibe que toda la gente que sale lo hace con bolsitas de libros que compró. Pero esperemos, a ver qué pasa en estos días con las ventas y la encuesta.
Da, sin embargo, un dato interesante: la totalidad de los estands se vendieron mucho antes
que en 2008. La renta de los salones para las diversas actividades se agotó dos meses antes que en otras ediciones.
Expresó un buen deseo ante la crisis económica: Ojalá que no bajen las ventas. Y si bajan, que no sea mucho
.