El operador del cártel de los Beltrán Leyva fue detenido en Santa Fe
Lunes 23 de febrero de 2009, p. 5
La Procuraduría General de la República (PGR) busca acreditar la probable responsabilidad en al menos 200 homicidios de Gerardo González, Tony la Mentira, quien es primo y también uno de los hombres más cercanos a Édgar Valdez Villareal, La Barbie, ambos jefes de sicarios del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, revelaron ayer fuentes oficiales.
González fue detenido el pasado viernes en el centro comercial Santa Fe, de la ciudad de México, y las autoridades de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) están a la espera de que un juez federal conceda hoy el arraigo por 40 días en contra de dicho sujeto, a fin de ampliar las investigaciones en su contra, obtener datos sobre el paradero de La Barbie y acreditarle el mayor número posible de cargos penales.
De acuerdo con las fuentes consultadas, Tony la Mentira es uno de los sicarios más violentos dentro de la organización delictiva que encabeza Arturo Beltrán, ya que antes de ejecutar a sus víctimas las golpeaba y sometía a torturas sicológicas, y en algunos casos mutilaba los cuerpos o los decapitaba.
Las primeras investigaciones revelan que este hombre operaba las células que dicha banda criminal tiene instaladas desde hace por lo menos dos años en municipios del estado de México y el Distrito Federal.
Según las indagatorias y testimonios recabados por las autoridades federales, el objetivo principal de Tony la Mentira era imponerse a grupos rivales de los Beltrán Leyva para controlar el mercado de drogas y el lavado de activos en el Distrito Federal y en los municipios conurbados.
Gerardo González operaba fundamentalmente en la zona de Santa Fe, en el Distrito Federal, y en Huixquilucan, estado de México, donde tomaba en renta residencias de lujo para utilizarlas como casas de seguridad en las que escondía cocaína, armas, dinero en efectivo y vehículos.
Registros de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal consultados refieren que en los últimos 14 meses, por lo menos cinco células del cártel de los Beltrán han sido desmanteladas en el Distrito Federal y en el estado de México.
Tan sólo la semana pasada fueron detenidos diez miembros de esa organización delictiva en Tultitlán, estado de México. Otra célula del grupo fue desmantelada en Huixquilucan, misma que estaba vinculada con la ejecución de 24 personas, en septiembre pasado.
Según las investigaciones de la SIEDO, Gerardo González era quien reclutaba y preparaba a su grupo de sicarios. Él personalmente se aseguraba que las víctimas estuvieran muertas y luego las mutilaba.
Ahora las autoridades buscan demostrar que este jefe de sicarios, junto con su primo Valdez Villarreal, es responsable en los cinco años recientes de unos 200 homicidios cometidos en contra de integrantes de bandas delictivas opositoras a los hermanos Beltrán Leyva, principalmente del cártel de Sinaloa, organización delictiva que encabeza Joaquín El Chapo Guzmán.