México ha destinado en los dos primeros años de este gobierno más de 6 mil 300 millones de dólares a la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico, señaló el embajador y subsecretario para América del Norte de la cancillería, Carlos Rico.

En un seminario sobre seguridad y desarrollo de la relación México-Estados Unidos, organizado por El Colegio de la Frontera Norte vía videoconferencia, el diplomático reseñó los esfuerzos realizados por este gobierno en esta lucha, y puntualizó que la Iniciativa Mérida, firmada por ambas naciones, significa más que recursos adicionales para el país en esta batalla.

Esta iniciativa significa el reconocimiento de la corresponsabilidad de los dos países en esta lucha, y hace que México se allegue de estrategias con las que no cuenta, como son el software de inteligencia de Estados Unidos, programas de seguridad, equipo especial para aeronaves y demás.

Hizo ver que nuestro país ha destinado recursos importantes a esta lucha, e incluso este año ha incrementado 40 por ciento su presupuesto anticrimen. Afirmó que la transferencia de recursos aprobados por el gobierno estadunidense es necesaria, “pero más importante es el esquema de cooperación y alejarnos de la visión ‘asistencialista’ en esta batalla”.

El embajador puso como ejemplo que lo más significativo de la Iniciativa Mérida sería un compromiso de Estados Unidos para tomar medidas contra el tráfico de los precursores químicos que se lleva a cabo en su territorio. Asimismo, acciones contra el tráfico de dinero en efectivo que hay en la frontera, y para frenar el comercio de armas, más allá de instalar detectores de metales.

Se trataría de desarticular el mercado secundario de armas en Estados Unidos, ya que se ha detectado que 97 por ciento del armamento decomisado en México proviene de ese país, y 10 por ciento del total de comercios en ese rubro en todo el territorio estadunidense se encuentra instalado en la frontera.

Por ello sería fundamental que el gobierno de Estados Unidos hiciera cumplir la Ley de Exportación de Armas, con acciones más intensas y operaciones de inteligencia, ya que no es necesario cambiar dicha legislación, sino únicamente vigilar su cumplimiento, toda vez que este ordenamiento considera que no se pueden exportar armas si al país que llegan son ilegales estos equipos. De esta manera se disminuiría el comercio de armamento hacia México, según indicó.

En su opinión, se trata también que mediante esta iniciativa no se tomen acciones de asistencia hacia nuestro país, sino medidas directas. Es un cambio total de enfoque en esta tarea común contra el narcotráfico, asentó, y agregó que ya se han puesto en marcha un buen número de programas específicos en torno a este acuerdo bilateral.