Las condiciones económicas que enfrenta el país obligaron a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a notificar sobre la primera obra de infraestructura detenida, pues los participantes en la licitación no ofrecieron ni el monto mínimo requerido.

La dependencia declaró desierta la licitación del paquete carretero del Pacífico, debido a que las empresas interesadas presentaron ofertas económicas inferiores a lo que el Estado mexicano pretendía obtener con la privatización de unos 800 kilómetros de carreteras, lo que refleja las condiciones económicas en el sector, y lo cual va en contra del propio Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) que se alimentaría de recursos obtenidos con esos concursos.

Los montos referidos no se dieron a conocer debido a que forma parte de información confidencial por estrategia gubernamental. Sin embargo el resultado de la licitación del Paquete de Occidente le redituó al gobierno alrededor de 44 mil millones de pesos, que se canalizaron al Fonadin.

La SCT señaló que el monto ofrecido por los dos únicos participantes refleja el desfavorable cambio de las condiciones riesgo-retorno en la economía global. Debido a ello, la contraprestación ofrecida por el otorgamiento de la concesión resultó inferior al valor mínimo de referencia establecido para la licitación y el concurso se declaró desierto.

Con esta licitación desierta el desarrollo de infraestructura en el país como medida contracíclica para enfrentar la crisis económica podría no ser tan eficiente como se espera, ya que además de este paquete carretero hay indicios de que también está atorado el concurso para el megaproyecto de transporte multimodal de Punta Colonet, el más importante de este sexenio; y habría que conocer el destino del Paquete carretero del Noreste que están en proceso de licitación.

La inviabilidad del concurso para el paquete del Pacífico obligará a la SCT a revisar su esquema de Aprovechamiento de Activos, y por lo pronto deberá rediseñar este conjunto de carreteras para hacerlo atractivo para los inversionistas.

Con base en las experiencias reunidas y con la asesoría y el apoyo del Banco Nacional de Obras (Banobras) y del Fonadin, la SCT revisará las características y los alcances de su programa de concesiones carreteras y lo ajustará para continuar con el desarrollo de infraestructura carretera en todo el país, tomando en cuenta los costos de inversión asociados a la ejecución de proyectos y las condiciones económicas en México y el resto del mundo.

Los concursantes por el Paquete del Pacífico fueron el consorcio integrado por Controladora de Operaciones de Infraestructura y caminos y Carreteras del Mayab, ambas filiales del Grupo ICA; mientras que la segunda fue Promotora del Desarrollo de América Latina. La empresa Obrascon Huarte Lain y el consorcio integrado por Global Vía Infraestructuras, Mexicana del Global Vía Infraestructuras y HSH Investments Limited enviaron ala SCT una carta de disculpa por no presentar su oferta.

El Paquete del Pacífico representaba la concesión de las autopistas de cuota Guadalajara-Tepic, Mazatlán-Culiacán y San José del Cabo-Aeropuerto, todas carreteras rescatadas por el gobierno federal hace más de una década, e incluía la construcción de los libramientos de Culiacán, Mazatlán, Tepic y Guadalajara, así como las autopistas de cuota Tepic-Compostela y Corredor Turístico Los Cabos.