El músico regresa a México como parte de una gira que abarca varios países de AL
Antes de irme de este planeta quiero tener un programa de televisión 24 horas al día, que nomás enseñe lo mejor de la humanidad: compasión, belleza, elegancia, comenta en conferencia
Jueves 5 de marzo de 2009, p. a10
Carlos Santana regresa a México y viene a ofrecer sus oraciones de rock: Mi mensaje para mis hermanos y hermanas es que si hay un concierto que tienen que ver en 10 años, es éste. Traigan a abuelitos, niños chiquitos, y todo lo de enmedio, porque éste es el concierto en el que se te paran todos los pelos y te hace recordar que no somos basura ni pecadores, somos hijos de Dios, somos capaces también de hacer milagros. El sonido de Santana es un sonido que trasciende a México, es el sonido de la voz de los invisibles, de la gente a la que no le da mucha atención la prensa
.
En conferencia de prensa vía telefónica, Santana lanzó: Mi música es como si yo fuera un ministro
. El ministro
(predicador) estará en México a finales de marzo y se presentará en Acapulco (día 19), Puebla (21), el Distrito Federal (22), Guadalajara (24) y Monterrey (26), como parte de una gira que incluyó algunos países de América Latina.
Muchos de mis chamanes favoritos son estrellas de rock. Probablemente ni saben que lo son, pero saben cómo llegar al éxtasis y de regreso, y cómo llevar a otros con ellos.
La frase está incluida en el librito del disco Supernatural, y bien puede aplicarse al célebre guitarrista mexicano, al roquero sin fronteras, pionero de lo que luego les dio por llamar world music y que tocó hace 40 años en el festival que marcó a una generación, Woodstock.
Pero a este chamán no le basta con predicar amor con su música. Su sueño, lo más grande antes de irme de este planeta, es tener un programa de televisión 24 horas al día, mundialmente, que nomás enseñe lo mejor de la humanidad
, o sea, compasión, belleza, elegancia
.
La armonía y la paz son posibles
También insistió en el tema de Arquitectos del amanecer, especie de red global, idea suya. En la página electrónica (http://architectsofanewdawn.com ) explica: Trabajar con la luz es un anhelo en mi corazón; como individuo que cree que la fe es la sustancia de las cosas que no se ven. Es una invitación a crear una nueva realidad, una nueva percepción para este planeta, donde la unidad y la armonía y la paz son posibles en esta vida
.
–Muchos de sus seguidores están preocupados porque dijo que a los 67 años se iba a retirar para ser ministro de un culto –le dijo La Jornada.
“Culto, no –aclaró–. Mi realidad es que nomás hay un Dios que nos hizo a todos. Él implantó luz en tu corazón. Quizá cuando tenga 67 años... pero cada vez que le digo a Dios mis planes, él se echa a reír.”
Y añadió: Pero no está fuera de la realidad, porque mi música es como si yo fuera un ministro
.
Con Santana siempre sucede lo mismo. A las preguntas de por qué no viene más seguido a su país, de que si va a hacer una obra caritativa en este viaje, de qué piensa sobre que hay mexicanos que lo critican (vive en Estados Unidos desde hace más de cuatro décadas), que... etcétera, las respuestas siempre son evasivas: todos somos hijos de Dios.
Pero hay otra historia, que empieza con doña Josefina Barragán, que lleva de la mano a su hijo para pedirle al líder de un grupo que había escuchado en el parque Teniente Guerrero, allá por los años 50 en Tijuana, que le enseñara a su hijo a tocar la guitarra eléctrica. Ese guitarrista era el líder de los Tj’s: Javier Bátiz, y lo que le enseñó al niño Carlos fueron los acordes de blues.
Su tía lo predijo de alguna manera. Dijo que sería un obispo, como se lo recordó La Jornada. Pero obispo definitivamente no quiere ser: ¡Mejor lavo platos!
Lo que es un hecho es su capacidad de convocatoria con las leyendas del blues y del rock, con quienes ha grabado varios discos: John Lee Hooker, Eric Clapton y Jeff Beck, entre muchos otros. Además, ha compartido escenario con una impresionante lista de grandes músicos, como Bob Dylan, Miles Davis, Rolling Stones, Buddy Guy y Rubén Blades.
Recordando su estancia en Tijuana, mencionó: “Había muchas clases de música –tradicional, mariachi, polka–, pero, con mucho respeto y honor, no me gustaba Elvis Presley, sólo me gustaba cuando tocaba blues”. Lo que a Carlos le gustaba era el blues.
La influencia de los tres reyes fue definitiva para mí: BB King, Freddie King y Albert King, aunque mi gran maestro fue mi padre
, dijo.
Respecto al ineludible tema del nuevo presidente Barack Obama, dijo que le parece que significará la diferencia, pero no lo puede hacer él solo
. Y siguió: Estados Unidos es una olla de caldo con gente de todo el mundo, pero el día en que los mexicanos, puertorriqueños, guatemaltecos... decidan no cultivar o cocinar o levantar comida del suelo (cosechar), si piensan que la economía está mal ahorita...
advirtió, indicando que sin los inmigrantes se caería la economía.
También fue interrogado acerca de qué música mexicana le gusta (me encantan Los Tigres del Norte, música que suena como si estuviéramos todavía al lado de Pancho Villa
) y qué comida mexicana extraña: Lo que más anhelo comer es biznaga y machaca
. Y añadió: A ver si Dios me bendice y encuentro biznaga, porque me encantan las semillas negras
.
–Chilacayote.
–Ah, sí, chilacayote.
–Te voy a tener dos o tres chilacayotes cuando vengas –le ofreció el periodista.
Una reportera argentina señaló que, como según ella hay mexicanos que no lo sienten tan mexicano
, los argentinos le ofrecían ser argentino.
Santana anunció que está metido en tres proyectos musicales, entre ellos uno llamado El padre, el hijo y el espíritu santo (tres cedés) y uno con el legendario productor Clive Davis (con quien hizo Supernatural), con dos o tres artistas invitados. Pero insistió: “En lo que más me concentro ahorita es en Arquitectos del nuevo amanecer. Si tienen computadora vayan e investiguen”.
Y se despidió con: Chilacayote y machaca, adiós
.