México vive una seria situación de dominio de la extrema derecha, señaló Néstor de Buen, abogado, catedrático y escritor experto en derecho laboral, en la ceremonia en la que fue investido miembro de número de la Legión de Honor Nacional de México.

Al recibir la condecoración, en la Escuela Nacional de Jurisprudencia, antigua Escuela de Derecho, y precisamente en el mismo salón en el que presentó su examen de licenciatura, De Buen llevó a los asistentes de ida y regreso por la historia de México y España, al relatar su vida, su llegada al país en los años 40, como hijo de un exiliado español.

De su trayectoria como abogado de múltiples sindicatos y luchas obreras, habló el presidente de la Legión de Honor Nacional de México, José Octavio Ferrero Burgos, quien le impuso la condecoración.

En la ceremonia, a la que asistieron políticos, académicos, empresarios y miembros de esta Legión, De Buen habló del México de ayer y de hoy. Dijo que ya el gobierno de Vicente Fox había dado una clara demostración del extremo derechismo de la política panista y dijo que nada hace suponer que esto vaya a cambiar con el gobierno de Felipe Calderón. Hizo ver que incluso cuando gobernó el Partido Revolucionario Institucional también el control del país lo tuvo la derecha.

Alertó que en materia de derecho del trabajo la tendencia es que desaparezca esa especialidad y se convierta en un derecho regulador de las relaciones laborales, y aun cuando en el nivel académico se reafirma la condición social del litigio laboral, las juntas de conciliación y arbitraje y las autoridades administrativas de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social han malinterpretado las leyes y ordenamientos en materia laboral para ser protectores de los intereses empresariales.

Néstor de Buen fue condecorado en las instalaciones de la Escuela Nacional de JurisprudenciaFoto Guillermo Sologuren

El sistema sindical mexicano, dijo, impulsa desde su origen el modelo fascista que puso en vigor en Italia Benito Mussolini, al propiciar el sistema corporativo de los sindicatos. Además, el registro de los gremios y la toma de nota de sus directivas por parte del Estado se han constituido en obstáculos insalvables para que los trabajadores puedan organizarse libremente.

En el acto también se contaron anécdotas, como cuando se asoció con Carlos A. Madrazo y fundó un despacho. Al decidir el nombre tuvieron dudas, pues denominarlo De Buen-Madrazo no favorecía la confianza de los clientes, por lo que optaron por Madrazo-De Buen.

Entre críticas a la reforma laboral que propone el actual gobierno y que afectaría, desde su punto de vista, derechos fundamentales de los trabajadores; con esperanzas en las luchas sociales y la unión de los trabajadores en ellas, De Buen dijo que se mexicanizó por inmersión, cuando hizo el servicio militar en el país. Recordó también cuando su padre, Demófilo de Buen, le preguntó qué le gustaría estudiar y él le contestó: me gusta mucho la historia, y su papá le dijo: vas a ser abogado, y eso ha sido su vida.