Atrae críticas sociales por su consumismo y medidas irreales
Domingo 8 de marzo de 2009, p. a10
Nueva York, 7 de marzo. A pesar de que ha pasado medio siglo de una vida excitante en el jet set internacional, Barbie sigue luciendo como una atractiva adolescente.
Lo logra sin esfuerzo. Después de todo, sus 29 centímetros de altura son puro plástico. Barbie es un objeto de lujo que también las masas pueden permitirse. Niñas pequeñas y grandes sueñan con tener su profesión, desde la azafata hasta la candidata presidencial.
Su inagotable ropero le garantiza una presencia impecable, desde la playa hasta la alfombra roja. La muñeca más exitosa del mundo cumple 50 años este 9 de marzo.
Barbie tiene piernas largas, cintura de avispa, pechos bien torneados. Especialmente estas características irritan a los enemigos de la muñeca.
Las feministas critican que por medio de Barbie se imponen clichés sexistas en cada nueva generación. Los sociólogos lamentan que la tendencia de Barbie a cada vez más accesorios eduque desde temprano hacia el consumismo. Los científicos denuncian que las exageradas medidas de la muñeca desatan en niñas jóvenes el deseo de un cuerpo extremadamente delgado y que podría fomentar la anorexia.
Pero a los fanáticos de Barbie esto no les importa. La muñeca se convirtió en un éxito desde que Ruth y Elliot Handler, fundadores de la juguetería Mattel, presentó en 1959 la primera Barbie en la feria del juego de Nueva York.
Ruth Handler tuvo la idea al ver jugar a su pequeña hija Bárbara, que prefería muñecas de papel hechas por ella misma que no parecían adultas ni niñas pequeñas. El mundo necesita una muñeca adolescente
, mencionó Hangler.
Ombligo y cintura
Barbie se puede remitir a las antiguas muñecas para vestir. Desde finales del siglo XVII hubo muñecas con camisas y sombreros, pieles, ropa interior y vestidos, que preparaban a las niñas para la adultez.
Pronto también hubo celulares Barbie, caballos Barbie, cosméticos Barbie, casas Barbie y coches Barbies, todo como en la vida real. Su apariencia cambió constantemente durante las pasadas décadas. Ahora parece un poco más amable. A comienzos del nuevo milenio, recibió un cuerpo más atlético, una cintura doblable e incluso un ombligo.
Sin embargo, tampoco debe ser demasiado realista. Hasta hoy, ni ella ni su ex novio Ken ni otras muñecas de su especie tienen órganos sexuales.
La perfección sufrió una grieta. A nivel financiero, Barbie está atravesando una crisis. La competencia es más joven. La serie de muñecas Bratz del rival estadunidense MGA, que llegó hace algunos años al mercado, complica el negocio a Mattel.
La rival de grandes ojos, que luce atrevida, tiene éxito especialmente entre las niñas más grandes. Por eso y debido a la crisis financiera, Mattel tuvo recientemente los peores resultados navideños en años. Las ganancias cayeron 46 por ciento. La propia Barbie se lo toma con tranquilidad, sigue sonriendo y vuelve a cambiarse de ropa.