ogotá. Para reducir la contaminación ambiental e invitar a los ciudadanos a utilizar medios alternativos de movilización, desde hace 10 años las autoridades de la capital colombiana realizan el 5 de febrero su día sin automóviles.

Este año la jornada se realizó en medio de un caos de movilidad, lo que obligó a la alcaldía a extender los horarios de pico y placa (restricciones de circulación de los coches que se hace tomando en cuenta el último número de la matrícula) de horas a días, medida que ha sido fuertemente cuestionada.

La mañana del pasado 5 de febrero los bogotanos tuvieron que movilizarse en vehículos de servicio público tradicionales, que se vieron abarrotados de personas desde tempranas horas.

Algunos más osados decidieron utilizar bicicletas y transitar por los carriles construidos en el periodo de 1999 y 2006, para concientizar a los ciudadanos de la importancia de adoptar otros mecanismos de movilidad y hacer ejercicio.

El día sin automóvil coincidió este año con la adopción del pico y placa por dos días a la semana, que aplicó la administración distrital a partir del viernes 6 de febrero a los vehículos particulares.

La medida afecta no sólo a los civiles que utilizan los automóviles exclusivamente para desplazarse, sino a muchas personas que trabajan con sus carros.

La Secretaría de la Movilidad de Bogotá anunció multas por 248 mil 500 pesos colombianos (cerca de 100 dólares) a quienes incumplan el día sin automóvil, la misma multa que se aplica cuando se infringe el pico y placa.

Dpa