Las restricciones para introducir droga a México vía aérea los obligaron a cambiar rutas
Los criminales expanden sus redes de las áreas urbanas a zonas suburbanas y rurales, señala
Miércoles 18 de marzo de 2009, p. 7
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal advirtió que es necesario aplicar políticas de prevención y combate frontal al delito, con la finalidad de impedir que los narcotraficantes se muevan desde el sur de México y el norte de Guatemala hacia Panamá, buscando nuevos mercados de consumo.
En un estudio de prospectiva, la SSP señala que los grupos criminales han ido ampliando sus redes de acción de las grandes zonas urbanas a las áreas suburbanas y las comunidades rurales del sureste de México.
“Las disputas que han tenido como escenario, primero la zona norte de México y recientemente la frontera sur, tienen explicación en la expansión del mercado de las drogas, particularmente de cocaína, en sentido norte sur.
Al respecto, los grupos criminales han ido ampliando su radio de acción
y “en un avance silencioso hacia las comunidades rurales del sureste del país en busca de nuevos mercados. Algo similar a lo que sucede con las franquicias mercantiles, sólo que a diferencia de éstas, los narcotraficantes van generando sus futuros compradores utilizando estrategias agresivas que incluyen la violencia y la eliminación de rivales.
“En este sentido, los grupos criminales invierten considerables sumas de dinero cooptando una especie de base social, que se encargará de informarles de las acciones de la autoridad, así como de reclutar a las propias autoridades locales, principalmente policías que carecen del perfil y salarios adecuados.
“(…) en este marco se inscriben los hechos de violencia más recientes suscitados en el norte de Guatemala, donde se ha concentrado gran cantidad de droga que no ha podido ingresar a México vía aérea por las restricciones, y comienza a ejercer la misma presión que hace algunos años en la frontera norte ante la dificultad de ingresar a Estados Unidos”, indica el documento.
De acuerdo con la SSP federal, el fortalecimiento de las medidas contra el tráfico de drogas en la frontera entre México y Estados Unidos modificó los patrones de consumo, convirtiendo a nuestro país de uno de paso de droga en uno de consumo.
Ahora, los impedimentos para trasladar cargamentos de droga vía aérea desde Centroamérica a México, y el que se obligue a toda aeronave procedente de esa zona a aterrizar en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, o Cozumel, Quintana Roo, ha provocado violencia y apertura de mercados hacia el sur de la frontera de México.