Sábado 21 de marzo de 2009, p. 25
Sao Paulo, 20 de marzo. Los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, exigirán ante la cumbre del G 20 que el mundo desarrollado tome medidas para atenuar el impacto de la crisis financiera sobre los países pobres y emergentes. En un discurso ante empresarios de Argentina y Brasil, reunidos en un seminario de negocios en la poderosa Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (FIESP), Kirchner afirmó que acudirán a la cumbre del 2 de abril en Londres para demandar que el mundo industrializado, que ha provocado la más fenomenal crisis de que se tenga memoria
, asuma su cuota de responsabilidad
. A su vez, el mandatario brasileño aseveró que, por primera vez en la historia
, los países pobres podrán sentarse a la mesa de negociaciones del G 20 con más autoridad moral que los desarrollados
, ya que no fueron los responsables de la grave crisis global.