La opacidad de la señora Pérez
Algo anda mal en el Infodf
pesar de las vestiduras hechas garras de quienes se han dedicado a defender a la señora María Elena Pérez Zermeño, alias María Elena Pérez-Jaén Zermeño, quien es funcionaria del organismo para la transparencia de la información oficial en el DF, los datos que siguen fluyendo sobre su personalidad jurídica parecen contradecir la labor que se le ha encomendado, y permanecen en una opacidad tal que no la hace digna del cargo que sustenta.
Veamos: en el estado de Guanajuato, la dirección general del Registro Civil hace constar en su libro segundo, del 16 de agosto de 1961, que el 31 de julio del año citado nació María Elena Pérez Zermeño, hija de Juan Luis Pérez, de nacionalidad española, y de la mexicana María Teresa Zermeño.
Hace ya algunas entregas explicamos en este espacio, con los datos que repetimos arriba, que María Elena Pérez-Jaén Zermeño, consejera ciudadana de Consejo de Información Pública del DF, pareciera no existir, jurídicamente hablando. María Elena Pérez Zermeño y María Elena Pérez-Jaén Zermeño son, al parecer, la misma persona, sólo que una, la segunda, podría ser un nombre falso. El Pérez-Jaén nace del apellido de la abuela paterna: Josefa Jaén, y la consejera se lo adjudicó –todo así lo indica– sin llevar a cabo, hasta donde se puede demostrar, los trámites que la ley exige.
El acta de nacimiento que se describe arriba tiene el número 06510, y una copia fue expedida, que quede claro, el 5 de marzo de 2009, es decir, hace poco más de dos semanas. En el documento –del que Ciudad Perdida tiene copia– se dan todos los datos que ya referimos.
Otro documento, este último fechado el 12 de marzo de este mismo año, y que da fe de la clave única de registro de población (CURP), habla de María Elena Pérez-Jaén Zermeño, que nació en 1961 y fue registrada con el número de acta 06510, en la ciudad de León, Guanajuato, datos idénticos a los de la constancia oficial de nacimiento de María Elena Pérez Zermeño, con una diferencia.
Según el Registro Civil de la ciudad de León, Guanajuato, el nacimiento de Pérez Zermeño se asentó en el libro dos del archivo de la oficialía de esa dependencia, y para la Secretaría de Gobernación, que expidió la CURP, el acta quedó en el libro número uno, y con el nombre de María Elena Pérez-Jaén Zermeño. Todos los demás datos son, como dijimos, idénticos.
Algo anda mal, sin duda. Alguien le mintió a la Secretaría de Gobernación, o la Secretaría de Gobernación confundió los libros, o quizá, ¿por qué no?, el mismo día, con el mismo nombre de los padres, en la misma ciudad, con el mismo número de acta, se registró a dos personas diferentes. De cualquier manera, el asunto debería investigarse en bien de la transparencia, y por lo pronto, mientras las cosas se aclaran, la consejera debería quedar suspendida de sus funciones. Total, si todo no es más que una confusión a su favor, ya se encargará la funcionaria de cobrar los días de suspensión, de eso no cabe duda. Ya veremos.
De pasadita
En política un ciego es el que niega la realidad, y peor, el que trata de que los demás, junto con él, la ignoren. La elección interna en el PRD, fue, se quiera o no, un cochinero. Los datos concretos así lo sustentan, y a nadie, menos aún al PRD, le conviene ignorarlos. Lo peor de las prácticas de las tribus aún no se conoce, pero causan, de eso no queda duda, asco. Ya les iremos dando datos de todo el asunto para tratar de hacer luz en todo este problema.