Sin conciencia compartida no hay nación y sin memoria no hay democracia, advirtió anoche Porfirio Muñoz Ledo, durante la presentación del fondo que lleva su nombre en el Archivo General de la Nación (AGN).

Con 50 años de experiencia y aportaciones a la vida pública, Muñoz Ledo es el primer mexicano que dona su copioso acervo personal al AGN para convertirlo, de esa forma, en un bien público, dentro del programa Archivos para la historia contemporánea.

Probablemente el hecho más destacado de mi trayectoria lo constituya ser hasta hoy el único mexicano viviente cuyos testimonios documentales han sido entregados al acervo de la nación. De modo además irreversible. En el sentido más cabal: aquí les dejo mi pasado y mi vida, no tiene regreso, expresó frente a amigos y compañeros de su larga trayectoria laboral en el sector público, en los partidos políticos, la diplomacia, el periodismo y la academia.

Son documentos contenidos en 541 cajas, equivalentes a 13 mil 437 expedientes, 365 videos, 594 audiocasetes y 3 mil 887 fotografías, así como 546 piezas hemerográficos, conservados por el esfuerzo y patrocinio del propio donante, quien se manifiesta respetuoso de todos los objetos que reflejan un esfuerzo del espíritu humano.

“Aquí yacen –expresó– trozos de vida disecados que dan cuenta de una terca esperanza. Piedras sueltas de un edificio por levantar y planos de una nervadura imaginaria. Vislumbres dispersos, entretejidos y todavía palpitantes de nuestro proyecto esencial: la construcción de una nueva república. En tal designio estoy comprometido hasta el tuétano.”

Luego, en breve entrevista, dijo que es necesario regresar a la investigación y al análisis de la vida pública para dejar atrás ese espotismo mediático que no es otra cosa que un disolvente de la democracia.

En primera fila estaban el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, y dirigentes de oposición que ahora acompañan a Muñoz Ledo –desde el Frente Amplio Progresista– en la ruta de impulsar proyectos desde la próxima legislatura de la Cámara de Diputados.

También a su lado, compartieron este momento otros dedicados al recuento de los hechos históricos: Fernando Zertuche, Javier Garciadiego y Carlos Martínez Assad, quien expresó que con este hecho Muñoz Ledo se agrega a la nómina de nombres notables que han contribuido a la formación de invaluables recopilaciones documentales.

Durante la presentación, Muñoz Ledo leyó cinco cuartillas cuyo contenido resultó en una emotiva reflexión de su propia vida, lo mismo en el parlamentarismo que en la rebeldía cívica; las decisiones vitales, las rupturas y los renacimientos.

Resumen de los documentos con los que, dijo, no busco la redención, aunque el acervo también ayudará a disolver ciertos mitos difamatorios que acompañan las trayectorias públicas.

El pionero de los Archivos para la historia contemporánea es Muñoz Ledo y se sumarán a este proyecto los acervos personales de Luis Herrera de la Fuente, uno de los músicos mexicanos más importantes del siglo XX; Adolfo Aguilar Zinser, diplomático, abogado y, durante su trayectoria, político de izquierda; posiblemente se agreguen también los documentos de Luis H. Álvarez, anunció anoche el director del AGN, Jorge Ruiz Dueñas.

Precisó que estas tareas se realizan en un marco de pluralidad académica y propician una neutralidad democrática sobre la reflexión del pasado.