El presidente Felipe Calderón pidió a legisladores de Estados Unidos que gestionen la prohibición de importar armas de asalto a su país, las cuales posteriormente son traficadas en México. Sin embargo, los congresistas admitieron que no se prevé ninguna medida al respecto en su nación, aunque están abiertos al debate.

Antes de viajar a Tamaulipas, Calderón se reunió ayer con los congresistas Ike Skelton, presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes; Howard Berman, presidente del Comité de Asuntos Internacionales, y Silvestre Reyes, representante demócrata hispano. Con ellos abordó algunos temas críticos para ambos países, como el tráfico de armas y la suspensión del programa de autotransporte.

Respecto de este último, Calderón señaló que, ante la crisis, se requiere promover una mayor integración regional y evitar el proteccionismo, según un comunicado difundido ayer por la Presidencia de la República.

Otros temas abordados con los legisladores

El diálogo en la residencia oficial de Los Pinos con los legisladores se prolongó más de una hora, durante la cual también abordaron, según el boletín, los esfuerzos que se llevan a cabo por dar mayor estabilidad a la región fronteriza y hacer más efectiva la procuración de justicia conjunta. De igual manera, se habló sobre medidas adicionales que se pueden implementar en el marco de la Iniciativa Mérida.

Acerca de esta última, el Presidente subrayó la importancia del programa y expresó a los congresistas estadunidenses, quienes asistieron con la representación de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara, su deseo por avanzar más rápido en esa estrategia para combatir con más eficiencia a la delincuencia.

Expresó su optimismo ante la actitud mostrada en días recientes por la administración del presidente Barack Obama, y consideró que los primeros pasos dados en la corresponsabilidad del combate al crimen serán la base para profundizar la cooperación entre ambos países.

Por otra parte, lamentó la suspensión del programa demostrativo de autotransporte mexicano a Estados Unidos, y externó su confianza en que pronto ese diferendo será resuelto, conforme a los mecanismos establecidos en el Tratado de Libre Comercio, el cual, enfatizó, ha traído grandes beneficios a ambas naciones.

Luego del encuentro con Calderón, en conferencia de prensa, el representante demócrata hispano, Silvestre Reyes, informó que el Congreso de su país no contempla por el momento acciones legislativas que permitan controlar el tráfico de armas a México.

Agregó que en la Cámara de Representantes no se tiene información exacta sobre el número de armas que cruzan la frontera y tampoco sobre el dinero que entra de manera ilegal. De hecho, puntualizó, sólo se tienen aproximaciones. Aseveró que no están seguros de lo que pasa en relación con ese tema.

Sobre la Iniciativa Mérida, el congresista Silvestre Reyes aseguró que se ampliarán los recursos, aunque no explicó cuándo ni cuánto. A Calderón le expresaron su compromiso por impulsar y agilizar la entrega de los fondos correspondientes a los ejercicios fiscales 2008 y 2009.

Silvestre Reyes dijo que su país está preparado para desarrollar planes de emergencia, en caso de que la violencia ligada con el narcotráfico brinque a territorio estadunidense, y subrayó que no está de acuerdo con la militarización de la frontera.

(Con información de Ángeles Cruz)