Viernes 3 de abril de 2009, p. 3
Londres, 2 de abril. La cumbre de líderes del G-20, reunidos en la capital británica, respaldó la decisión de México de buscar un préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y señaló que los recursos adicionales aprobados para los mercados emergentes deben servir para financiar gasto contracíclico, recapitalización de bancos e infraestructura, aspectos no mencionados hasta ahora por el gobierno mexicano, y para respaldar la balanza de pagos.
En su declaración final, ese foro de naciones aplaudió al FMI porque la nueva línea de crédito flexible, de la que México sería el primero en participar, tiene el propósito de atender las necesidades de balanza de pagos de cada país y particularmente el retiro del flujo de capital externo del sector bancario corporativo.
En ese contexto, como parte de las conclusiones del G-20, el caso mexicano fue mencionado como ejemplo del progreso
alcanzado por el Fondo Monetario Internacional, con un nuevo esquema de otorgamiento de créditos sin condiciones para los países que los reciben.
Asimismo, en su apartado 18, resalta que los mercados emergentes han sido el motor de crecimiento y también están enfrentando retos que se agregan al actual descenso de la economía global.
Precisa que para superar esta situación anunció que destinará 850 mil millones de dólares adicionales para respaldar el crecimiento en los mercados emergentes y economías en desarrollo, ya que es imperativo que el capital siga fluyendo hacia estas economías, para recuperar la confianza.
Finalmente afirma que es esencial que estos recursos puedan ser usados efectiva y flexiblemente
para respaldar el crecimiento de las diferentes economías.