Derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con insuficiencia renal crónica realizaron ayer un plantón frente a las oficinas centrales del organismo para exigir que se mantenga el servicio de hemodiálisis que reciben con la empresa Fresenius Medical Care, cuyo contrato termina, supuestamente, el 15 de mayo, por lo cual serían atendidos por otra empresa que carece de la infraestructura para garantizar su salud, dijeron. Los inconformes aseguraron que han preguntado a los directivos de sus clínicas y hospitales sobre la información que se ha difundido en diversos medios de comunicación, pero nadie les ha dado respuesta. Ante la incertidumbre sobre el futuro de su calidad de vida, la cual depende de las terapias de hemodiálisis, decidieron acudir a la sede del IMSS, pues se ha difundido de manera extraoficial que se contrataron los servicios de otra empresa, Corphomed, la cual carece de infraestructura. Los pacientes señalaron que unos 4 mil 400 enfermos de insuficiencia renal serían afectados. Representantes de los enfermos y sus familiares se reunieron con funcionarios del IMSS. Al término del encuentro, informaron que se elaboró un documento en el que se asegura que el contrato con Fresenius estará vigente este año.