Comienza el espectáculo de la voz humana: Voz en Punto. Seis artistas: dos tríos; tres sopranos, una, dramática; dos tenores y un barítono, llenan la escena de polifonías y sabor de fiesta y alegría. Con un afinador, su director y fundador, José Galván, quien les da el tono y se arrancan con El son de La Negra, y es como si el mariachi mismo estuviera ahí con las trompetas, violines y guitarras, y viéramos el vuelo de los vestidos con listones de colores; se siguen con Copitas de mezcal, corrido con el que el alma herida se revuelca en su dolor con un vozarrón aguardentoso, mientras el quinteto se bambolea bien bolo; el público palmea animado el famoso estribillo: Que sirvan las otras copitas de mezcal,/ que al fin nada ganamos con ponernos a llorar. Tras la ovación que exige otra, obsequian un swing de Glenn Miller: De buen humor. Y el sexteto logra recrear el elenco de los 16 músicos de las grandes bandas, con todo el brillo de los años 40 en los metales del sonido Miller.

Después de ver en acción a Sonia Solórzano, Mariana Lorenzo, Vanessa Millán, José Galván, Luis E. Martínez y Santiago Menéndez queda claro que Voz en Punto no es un grupo coral más, sino una gran orquesta que simula ser un ensamble de voces, como bien lo definiera Miguel Ángel Granados Chapa.

Este original ensamble es un mundo de sonidos que surge de la invención y la experimentación continúa. Ellos, como el rey Midas, todo lo han tocado y convertido, si no en oro, sí en un éxito rotundo en todo el mundo.

Su capacidad de interpretación los hizo merecedores de la Medalla Mozart 2009, que recibieron de manos del embajador de Austria en México en febrero pasado, y el 3 de junio formarán parte con el conjunto de ensambles europeos, cuyas actuaciones conmemorarán los 20 años del Festival Internacional Coral de Tampere, Finlandia, el mismo donde en 1991 ganaron el segundo lugar, lo que los internacionalizó y dio a su vida artística un giro.

Sonia, soprano dramático y fundadora del grupo, rememora: “Éramos estudiantes de la carrera de canto de la Escuela Superior de Música (ESM) cuando nos fuimos al concurso de ensambles vocales de Tampere, Finlandia, donde competimos con Suecia, Alemania, Rusia, Finlandia, países con grupos vocales de tanta tradición que nos llevaron a decir ‘¡pero qué hacemos aquí!’, y aun así ganamos el segundo lugar”.

De ahí en adelante les llovió el trabajo en Alemania, Francia, Holanda, Rusia, Japón, España y Estados Unidos, donde unirán voces en septiembre próximo con la Orquesta Barroca Mercury, en Houston.

Entre los galardones que han recibido figuran el de las Tribunas de la Música de América Latina y el del Caribe CIM/UNESCO, otorgado a sus discos México a capella y México en Navidad, ganadores entre miles de grabaciones de todo el continente.

Sus discos se venden muy bien, tanto, que Copitas de mezcal ocupó los primeros lugares en Last.fm, según refiere divertido Luis E. Martínez: “¡Estuvimos en el top, arriba del divo Luis Miguel!” “Y un video de Bobby McFerrin con nosotros registró ¡un millón de visitas en una página web española!”, agrega Vanesa Millán, secundada por Santiago Menéndez.

Hace 20 años, cuando empezaron, nunca imaginaron que páginas web de Brasil o de Japón hablarían de ellos, ni que serían los primeros mexicanos en alternar con los King’s Singers y Bobby McFerrin, considerados lo máximo en ensambles, y quienes nos invitaron a cantar con ellos en sus presentaciones en México, destaca Galván.

“Las cosas se ven muy fáciles y divertidas cuando ya están armadas –subraya Sonia–, pero hay mucho trabajo detrás. Como artistas escénicos trabajamos el triple: debemos leer, conocer más, manejar un discurso corporal y estar al día. Y la voz tiene que estar al punto para que salga la entonación perfecta.”

Voz en Punto se presenta en el teatro Hidalgo el sábado 23 de mayo a las 19 horas, y el domingo 24 a las 17.30 horas. Boletos en Ticketmaster.