ieza por pieza va armándose el rompecabezas que contiene las claves del desencuentro de Felipe Calderón y Carlos Slim. Podría tener repercusiones políticas impredecibles, no sólo financieras. La noche que el presidente Zedillo anunció la derrota de su candidato, Francisco Labastida Ochoa, fue fotografiado Slim, cariacontecido, junto al senador Enrique Jackson, en la explanada del edificio del PRI de Insurgentes. Como todos –o casi– los grandes empresarios del país, amasó su fortuna en el priísmo. Rodando la carreta, la ambición desbocada de la señora Marta y Vicente Fox los condujo a ganarse a Slim y, de paso, sus generosos donativos a la Fundación Vamos México. Fueron seis años felices. Sin embargo, López Obrador jaló al poderoso billonario a su proyecto del Centro Histórico, muchos supusieron que lo apoyaba en sus aspiraciones políticas y eso dejó una sombra en su relación con el panismo. Vale este extenso preámbulo para informarles que el desencuentro de Calderón y Slim aterrizó en las páginas de la prensa de Estados Unidos. Un reportaje escrito por el periodista Lawrence Wright en la revista New Yorker, que circula con fecha de la próxima semana, hace una relación detallada de las fricciones. No son cosa menor. Han llevado al empresario –dice Wright– a decirle con rudeza a Calderón: Díganme qué quieren. Si quieren que venda, está bien. Si quieren que nos dividamos en dos, tres partes, está bien. Lo único que no haremos es destruir a Telmex.

Un mal momento

Los dioses ciegan a los que quieren perder, decían en la antigua Grecia. Parece que entre todos los momentos en que Calderón pudo enfrentar al poderoso grupo Slim éste es el menos adecuado, y sólo se explicaría por su inexperiencia y la presión de Televisa y Roberto Hernández. Apenas hace unos días, el ocupante de Los Pinos lanzó un golpe demoledor: anunció que la Comisión Federal de Electricidad alquilará bajo el esquema de licitación su red de telecomunicaciones. Eso abre las puertas a una nueva empresa telefónica que se ahorrará la inversión inicial de 300 millones de dólares. El líder del sindicato de telefonistas, Francisco Hernández Juárez, reaccionó con fuerza: lo que se propone Calderón es arruinar a la compañía, con daño directo a los trabajadores. Es una afirmación exagerada: se supone que Telmex debe ser capaz de enfrentar no sólo a un competidor sino a varios. A principios de febrero, Slim también había soltado un cañonazo: dijo que sin ser catastrofista, veía venir el cierre de empresas, pérdida de empleos, desplome de la economía. De inmediato se lanzaron en su contra dos calderonistas: Javier Lozano y Molinar Horcasitas, ascendido este último a la Secretaría de Comunicaciones. Cabe una acotación: hay niveles, son gente menor, ninguno tiene tamaños para ponerse los guantes con Slim. El conflicto, pues, podría tener implicaciones políticas enormes, más allá de las financieras. El grupo Slim es un territorio dentro del territorio de nuestro país que da albergue a políticos de todos los partidos, a gobernadores, senadores, diputados, alcaldes, empresarios, medios de comunicación, intelectuales, artistas, está muy extendido. No se debe descontar la posibilidad de que Slim reverdezca sus lazos con el PRI –nunca los rompió– y con su enorme fortuna lo ayude a reconquistar la Presidencia. Hay un dato nada desdeñable: tiene mejores relaciones con la Casa Blanca que el calderonismo. Recuérdese que es patrocinador de la Fundación Clinton y con frecuencia se reúne con el poderoso matrimonio, del que una mitad de la naranja ocupa la Secretaría de Estado. Sin contar la influencia internacional que le da ser mecenas de The New York Times.

Propuesta: menos legisladores

Eco del sentir de muchos ciudadanos de la República, la Asociación Política Nuevo Milenio (Integración Ciudadana) de Baja California propone suprimir en forma inmediata la mitad de los diputados y senadores de partido –los no electos por voto ciudadano, sino por arreglos de las cúpulas de los partidos. Sería un ahorro de más de 2 mil 600 millones de pesos cada tres años. Para que fuera mayor el ahorro, también propone que los ingresos de los 100 diputados y 32 senadores plurinominales que todavía quedarían, sean cubiertos por sus respectivos partidos con fondos que actualmente reciben del IFE. La Asociación Milenio está afiliada al PRI.

e@Vox Populi

Asunto: el reparto de utilidades

Tengo unas dudas: en años anteriores durante este mes se escuchaban anuncios en los medios de comunicación que promocionaban el pago de la participación de utilidades y ponían como fecha límite (si no mal recuerdo) el último día de mayo. Decían que es un derecho del trabajador y una obligación por parte del patrón. ¿Se ha cancelado de facto dicho reparto? ¿El que no lo anuncien quiere decir que las empresas pueden o no dar dichas utilidades?

IQ Adrián García A./Distrito Federal

R: El derecho continúa vigente, con o sin anuncios. El tiempo del Estado en los medios electrónicos se está usando en las campañas, porque parece que interesa más conservar ciertas posiciones que tienen que ver con el reparto de utilidades del negocio del que han venido hablando Ahumada, Madrazo y De la Madrid.

Asunto: promoviendo Veracruz

Según Fidel Herrera Beltrán, La Gloria, el pueblecillo en que se sospecha se originó la influenza, gracias a la difusión se convirtió en atractivo turístico. Ergo: ¡hay que inducir la peste bubónica en todo Veracruz para que se convierta en destino turístico más atractivo que la Costa Azul o Las Vegas!

Rubén Mújica/Distrito Federal

R: Toma en cuenta que ya tiene otro atractivo: la estatua de Fox. Uuuuy, prepárense a una inundación de turistas.

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