La mañana de ayer, durante los funerales del periodista Eliseo Barrón Hernández, del diario La Opinión Milenio de Torreón, Coahuila, asesinado a balazos el martes en el municipio de Gómez Palacio, Durango, cinco mantas con amenazas en contra de reporteros fueron colgadas por desconocidos en diferentes sectores de Torreón. Uno de los escritos fue colocado frente al edificio de la empresa Televisa Laguna, y otro más a un costado de una estación de radio.

“Cuídense periodistas y militares, que El Chapo está aquí”, decía uno de los narcomensajes. Dos recados fueron colocados a un costado del museo conocido como La Casa del Cerro y otro más frente a un centro comercial. Elementos del Ejército Mexicano retiraron todas las mantas.

En tanto, el delegado de la Fiscalía General de Coahuila en la región de La Laguna, Fernando Adrián Olivas Jurado, aseguró que cualquier periodista de la entidad que se sienta amenazado o que haya sido víctima de amagos podrá contar con protección policiaca.

La seguridad tendrá que ser a solicitud de las propias personas que requieran esta presencia policial; de hecho el fiscal general, Jesús Torres Charles, nos dio instrucciones de que nos pusiéramos a disposición del área periodística para brindarles protección, puntualizó.

Por su parte, la Unión de Reporteros Gráficos de Durango lamentó la muerte de Eliseo Barrón. El presidente de la asociación, Héctor Aldama Peinado, se quejó de que ya no se pueden tener ni los derechos ni las garantías mínimas para ejercer el periodismo.

En tanto, la directiva del PAN en Durango afirmó en conferencia de prensa que el homicidio del periodista representó una afrenta a los medios de comunicación, y atribuyó el asesinato a que existe tibieza de las autoridades para actuar, por lo que pidió a los gobiernos federal y estatal que otorguen garantías para quienes se dedican a la labor periodística.

A su vez, el gobernador de Durango, Ismael Hernández Deras, sostuvo que en la entidad existen garantías para los comunicadores.