Hamburgo/París, 29 de mayo. Todos los equipos que conforman la Asociación de Escuderías de Fórmula Uno (FOTA, por sus siglas en inglés) se inscribieron finalmente en el último día de plazo para la temporada 2010 del máximo circuito, aunque lo hicieron poniendo condiciones.

Las pláticas se hicieron hoy en Ginebra ante la FIA (Federación Internacional de Automovilismo) y ahora esperamos su respuesta, dijo el vicepresidente de FOTA, John Howett, de Toyota.

Varios equipos, encabezados por Ferrari, amenazaron con no formalizar su inscripción para 2010, cuyo plazo terminaba la medianoche de hoy, en protesta por el límite presupuestal que quiere imponer la FIA.

Sin embargo, la FOTA confirmó en un comunicado el compromiso de todos sus miembros para involucrarse a largo plazo en el campeonato del mundo de la F-1 de la FIA.

De esa forma, se cierra de momento una lucha de poder que duró semanas entre la asociación de equipos y el presidente de la federación internacional, el británico Max Mosley.

No obstante, los equipos se inscribieron pero bajo ciertas condiciones. La primera es que antes del 12 de junio deberá estar firmado un nuevo acuerdo concorde con el dueño de los derechos de la F-1, el también inglés Bernie Ecclestone, en el que se regule el reparto del dinero y en el que los equipos se comprometen a participar en el circuito hasta 2012.

La segunda condición se refiere a que el reglamento de 2010 se base en el que está en vigor y que sea igual para todos, por lo que se espera que la FIA haga una modificación referente al punto del conflicto, que es el límite de presupuesto que pretende imponer, de 45 millones de euros, para cada equipo y las ventajas técnicas asociadas a las escuderías que respetaran.

En la solicitud de la FOTA podría pesar la propuesta de Mercedes, que apunta a un tope de 100 millones de euros, para disminuir a 45 en 2011.

En contrapartida, según el salomónico plan de Mercedes, los nuevos equipos que se inscriban en el Mundial tendrían apoyo económico en la construcción de sus monoplazas, además de una transferencia de conocimientos técnicos.

Los planes de la FIA de establecer en el futuro un límite presupuestario parece ser clave en la decisión de hasta cinco escuderías de solicitar su participación en el campeonato del mundo.