La Reserva Ecológica del Pedregal de San Ángel es un laboratorio natural que ayuda a conocer el desarrollo de la ciencia natural en el país, aseguró el coordinador de Investigación Científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Carlos Arámburo de la Hoz.

Durante la presentación del libro Biodiversidad del ecosistema del Pedregal de San Ángel, se informó que esta área, que abarca unas 237 hectáreas, representa 33 por ciento del territorio total de Ciudad Universitaria (CU) y es un patrimonio invaluable para la UNAM, la ciudad de México, el país y el mundo, aseguró.

Este espacio se encuentra en proceso de convertirse en área natural protegida, aunque investigadores de la máxima casa de estudios se pronunciaron por lograr ese reconocimiento paso a paso.

Por su parte, Antonio Lot, secretario ejecutivo de la reserva, informó que aunque es un lugar agreste y árido, posee 70 por ciento de especies animales del valle de México y 40 por ciento de las aves que existen en la cuenca.

Señaló que se localizan 350 especies de plantas vasculares, entre las que destacan 27 variedades de orquídeas. También se hallan 33 géneros de mamíferos, como roedores, mapaches, tlacuaches, cacomixtles y murciélagos.

Lot alertó del cuidado que los ciudadanos deben dar a zonas naturales como el Pedregal, pues, pese a contaminación, ruido y expansión demográfica ha mantenido su diversidad.