Chalco, Méx., 2 de junio. Una grieta de un kilómetro de longitud y hasta cinco metros de profundidad en algunos tramos se formó entre dos fraccionamientos en construcción y afectó a cuando menos 54 familias que ya habitan algunas de esas viviendas de interés social en el poblado de San Martín Cuautlalpan, unos cinco kilómetros al oriente de la cabecera municipal de Chalco.

La fisura comienza debajo de la unidad Rancho San Juan, que construye el Grupo ARA, avanza hacia el oriente y atraviesa un predio de más de 400 metros, donde alcanzó un ancho de unos tres metros y más de cinco de profundidad. La abertura se reduce al llegar al fraccionamiento Villas de San Martín, construido por la empresa Dadivir, donde ya habitan decenas de familias.

La fractura se produjo la noche del lunes y los moradores fueron desalojados. El gobierno municipal clausuró las obras y advirtió que los sellos no podrán quitarse hasta que Protección Civil estatal tenga los estudios necesarios para determinar la causa.

La mañana de este martes el Ejército Mexicano desplegó un grupo soldados, quienes, junto con efectivos de la Agencia de Seguridad Estatal, acordonaron la zona donde ARA y Dadivir construyen más de 5 mil casas de interés social.

En el fraccionamiento Villas de San Martín la grieta pasa por debajo de casas en construcción y 54 habitadas en las calles Querétaro, Guanajuato, Jalisco y estado de México.

Decenas de vecinos protestaron porque la mayoría aún no cumple un año de haber comprado sus viviendas y ya están dañadas, por lo que exigieron ser reubicados.

Una de las versiones que circuló fue que la lluvia y el desbordamiento de un canal provocaron el reblandecimiento del suelo la noche del lunes.

Un vecino nos avisó que se había desbordado el canal de aguas negras y que se había abierto la tierra. Todos salimos espantados, recordó Diana Pimentel García.

No hubo desgracias, pero ¿para qué esperamos? Nuestras vidas están en riesgo, dijo José Medina Hernández.

No queremos pasar otra noche aquí. La casa truena y empezó a hundirse, dijo Rosalba Mérida Hernández, quien vive en la calle Querétaro, manzana 11, lote 8. Narró que alrededor de las 21:30 horas del lunes se escuchó un estruendo. Este martes comprobó la dimensión del daño y exigió su reubicación.

La mañana del martes llegaron Raúl Arroyo Tinoco y Francisco Romero, ingeniero y arquitecto de la empresa Dadivir, quienes notificaron a los vecinos que primero debían obtener un peritaje antes de pedir la reubicación.

Arturo Vilchis Esquivel, director de Protección Civil del estado, informó que se requieren estudios para determinar qué causó la fractura. Recordó que está región de Chalco forma parte del sistema lacustre del valle de México y es susceptible a hundimientos.

Según la inspección que hicimos en la mañana, parte de esta situación podría deberse a la condición del canal; a simple vista no se aprecia afectación en la obra negra de los dos desarrollos, pero se van a inspeccionar, explicó.

El secretario general de Gobierno (Luis Miranda) ordenó suspender los trabajos. Las dos empresas, ARA y Sadasi, van a drenar el canal para garantizar que el agua fluya, dijo.

Antes del mediodía llegó un grupo de técnicos que, con un radar de penetración terrestre diseñado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) inspeccionaron tres puntos del fraccionamiento y recorrieron 378 metros lineales.

Jaime Ocaranza Maldonado, encargado del Centro de Monitoreo de Fracturamiento del Subsuelo (CMFS) de la delegación Iztapalapa del Distrito Federal, informó que el equipo nos permite conocer la profundidad (de la grieta), que en la zona habitada es de entre dos metros y dos metros y medio.

Al concluir el estudio el funcionario aseguró: No vemos que sea algo muy grave, pero se necesitan más estudios para tener una comparación.

El personal del CMFS fue capacitado por el Instituto de Geociencias de la UNAM para estudiar las grietas en Iztapalapa, delegación que colinda con Chalco. Para ello cuentan con dos radares de penetración terrestre, equipos para medir la propagación de ondas mecánicas, de videoinspección y detección de fugas, entre otros.

(Con información de Claudia Álvarez Laris)