El grupo armado sostiene que el gobierno insiste en cometer crímenes de lesa humanidad
Alerta que el pueblo organizado y los líderes sociales corren peligro por la represión oficial
Miércoles 3 de junio de 2009, p. 16
Oaxaca, Oax., 2 de junio. El Ejército Popular Revolucionario (EPR) sostuvo que los crímenes de lesa humanidad, como lo es la detención-desaparición forzada, cuando son ejecutados de manera sistemática por un gobierno se convierte en política de Estado
. Eso ha estado sucediendo en el país y es parte del proceso de involución democrática que se vive con la llegada del panismo al gobierno federal
, agregó.
En el número 117 de El Insurgente, su órgano de análisis y difusión, el grupo armado sostuvo que la detención-desaparición forzada de sus compañeros Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, ocurrida el 25 de mayo de 2007 en esta ciudad, es un crimen de lesa humanidad y el gobierno de (Felipe) Calderón la utiliza como una política de Estado ante la falta de legitimidad por haber llegado a Los Pinos producto de un proceso fraudulento e impuesto finalmente con el respaldo del Ejército Mexicano y los cuerpos policiacos
.
“La detención-desaparición de nuestros compañeros –señaló–, no es un asunto menor, es un problema nacional que abarca a los diferentes sectores de la sociedad que han manifestado de manera diferente su inconformidad con las políticas de este gobierno. Es un crimen de lesa humanidad que gobiernos priístas y panistas han impulsado en diferentes momentos como política de Estado.”
Destacó que si en mayo de 2007 “quedó al descubierto la campaña de contrainsurgencia contra los luchadores sociales y las organizaciones del pueblo que lucha fuera de las estructuras corporativizantes, en el transcurso de estos años se ha ido comprobando la existencia de grupos paramilitares estructurados y dirigidos en su operatividad por las corporaciones policiaco-militares encargados de ‘levantones’ y desapariciones para no manchar’ el nombre y el uniforme de las fuerzas armadas”.
El Ejército no ha aprendido a detener-desaparecer y a asesinar, esto siempre lo ha hecho; la diferencia estriba en que hoy lo hace con todo el aval del jefe del Ejecutivo, quien busca legalizar jurídicamente las atrocidades que cometen las fuerzas represivas
, agregó.
Resaltó que en el actual contexto del país, donde todo el esfuerzo del gobierno calderonista, el panismo y sus legisladores profascistas, así como la exigencia de la oligarquía autoinvestida como sociedad civil, exigen la implantación de un Estado policíaco-militar, el pueblo organizado, sus organizaciones y los luchadores sociales corren un grave peligro, la política de criminalizar la pobreza y el descontento social está encaminado a difundir e imponer el terror de Estado
.
A todos los detenidos-desaparecidos, a nuestros camaradas estén donde estén, en las condiciones que los mantienen, tengan la plena seguridad que seguiremos luchando por su presentación a la vez que construimos y avanzamos en el cumplimiento de las tareas que conduzcan a la nueva revolución que apremia nuestro pueblo
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