El combustible hallado en el Atlántico excluiría hipótesis de explosión: Brasil
fallas en serieantes de caer
Según reporte de Journal da Tarde, Air France recibió todas las alertas
Jueves 4 de junio de 2009, p. 41
Brasilia, 3 de junio. Los rastros de combustible en el área del océano Atlántico donde cayó el avión de Air France puede excluir la hipótesis de que se produjo una explosión en la aeronave, dijo este miércoles el ministro de Defensa de Brasil, Nelson Jobim.
La única hipótesis que se puede trabajar es que, si tenemos manchas de combustible, eso significa que dicho combustible no se quemó
, dijo Jobim en conferencia de prensa en Brasilia.
El Airbus A330-200 que la noche del domingo cayó en el océano Atlántico con 228 personas a bordo –cuando cubría la ruta Río de Janeiro-París– tuvo fallas en serie durante cuatro minutos antes de desplomarse, aseguró hoy el vespertino brasileño Jornal da Tarde.
Según el rotativo, que se basa en los mensajes automáticos enviados por la aeronave a la sede de Air France en París, la primera advertencia apareció a las 02:10 GMT, 10 minutos después de que los pilotos informaron que pasaban por una zona de tormenta.
La primera señal de que había problemas a bordo fue un mensaje cuyo texto informaba que el piloto automático había sido desconectado y que el avión estaba siendo comandado manualmente, agregó el reporte.
Segundos después, la sede de Air France recibió otros dos mensajes automáticos que daban cuenta de que el sistema fly-by-wire, esencial para la estabilidad del A330, estaba siendo operado mediante el régimen de control alternative law, que entra en operación cuando hay fallas múltiples en los proveedores de electricidad.
El reporte afirma que, en ese caso, el Airbus sigue teniendo potencia eléctrica y puede volar normalmente, pese a tener afectados algunos controles de inclinación
.
Según el diario, inmediatamente después los pilotos recibieron la advertencia de que también se había perdido el control alternative law y una alarma sonó en la cabina.
A las 02:12 GMT llegaron a la sede de Air France nuevos mensajes automáticos con la advertencia de fallas en otros dos equipos: el Air data inertial reference unit (Adiru) y el Integrated standby instruments system (Isis), encargados de transmitir a los pilotos datos esenciales sobre velocidad en el aire, altitud y dirección de la aeronave.
Un minuto más tarde, nuevas alertas anunciaron fallas eléctricos en los sistemas PRIM1 y SEC1, que forman parte de la computadora principal de vuelo y controlan los spoilers de las alas. Según el reportaje, el A330 tiene equipos para suplir dichas fallas, pero al parecer esos sistemas tampoco funcionaron.
El último mensaje automático, enviado a las 02:14 GMT, era un alerta de cabin vertical speed (cabina a velocidad vertical), lo que significa pérdida de presurización y la entrada de aire externo en la aeronave.
Según expertos consultados por el rotativo, esa alerta puede significar que ocurrió una pérdida súbita de presurización o indicar que, en ese momento, el avión ya se desplomaba en el Atlántico, cerrando los cuatro minutos de agonía.
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) ubicó hoy sobre el Atlántico más restos metálicos –incluso un objeto de siete metros de diámetro– del Airbus A330-200.
Según el portavoz de la Aeronáutica, coronel Jorge Amaral, los restos fueron detectados por los radares del avión R99 de la FAB y luego avistados por las 11 aeronaves que realizaron el rastreo, unos 90 kilómetros al sur del lugar donde ayer fueron encontrados varios fragmentos del avión siniestrado.
Además de los objetos metálicos, los equipos de búsqueda desplazados por Brasil ubicaron en la región una mancha de combustible de 20 kilómetros de extensión.
La recuperación de los fragmentos empezará en las próximas horas, apenas lleguen a la región los cinco buques enviados por la Armada brasileña. El primero de ellos, el barco patrullero Grajaú, arribó esta mañana al área del accidente, donde a lo largo del día de hoy llegarán otras dos embarcaciones, una corbeta y una fragata.
Buscan sobrevivientes
Aunque ya no hay dudas de que el Airbus de Air France cayó en el mar, Amaral aseguró que la Aeronáutica brasileña aún no descarta la posibilidad de que haya sobrevivientes.
Por su parte, los expertos franceses aclararon que no habrá un rápido esclarecimiento de las causas del misterioso accidente.
Las investigaciones duran mucho, a veces muchísimo, porque no hay que conformarse con 80 por ciento de comprensión
, dijo el director de la Oficina de Investigación y Análisis de Accidentes (BEA), Paul Louis Arslanian.
La búsqueda de las cajas negras será muy, muy difícil, apuntó, ya que el aparato cayó en una zona donde el mar es especialmente profundo y el lecho submarino muy montañoso
. La BEA tiene previsto presentar un primer reporte a finales de junio.
El siniestro del Airbus ocupa también a la fiscalía en París, que indaga si alguna persona tiene responsabilidad en el desplome del avión. La fiscalía asumió la instrucción del sumario porque hay varios parisinos entre las víctimas.
Pocos días antes de la caída del Airbus A330- 200 Air France recibió una amenaza de bomba contra otro vuelo que se dirigía de Sudamérica a Europa. El vuelo afectado fue una conexión desde Buenos Aires hacia París, el 27 de mayo. Sin embargo, rápidamente se confirmó que se trató de una falsa alarma, dijo un portavoz de Air France.
Asimismo, la aeronave siniestrada el pasado lunes, con sólo cuatro años de servicio, estuvo involucrada hace tres años en un accidente en tierra, cuando chocó en la pista del aeropuerto parisino Charles de Gaulle con otro Airbus, el 17 de agosto de 2006. Expertos descartaron que este incidente produjera averías que condujeran a su desplome.
Mientras tanto, el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, junto con su esposa, Carla Bruni, participó hoy en una misa en la catedral parisina de Notre Dame.