El jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Marcelo Ebrard Casaubon, apremió al Congreso de la Unión a convocar a la firma de un acuerdo nacional para la reactivación económica nacional, igual al que signó en materia de seguridad pública.

Estamos en una situación de emergencia económica, no es un catarro, es un virus peor que la influenza, advirtió el mandatario.

Al término de la presentación del Plan de Acción para el Ahorro de Energía en el Distrito Federal, se le preguntó si mantenía el optimismo de que el gobierno federal atenderá las propuestas que hizo en la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública. Y Ebrard respondió: tengo que ser optimista, no quiere decir que sea ingenuo, optimista sí.

E insistió en que un problema tan serio como la emergencia económica que se vive en todo el país no es algo que se pueda eludir o evadir, o simplemente ocultar debajo de la alfombra, porque estamos en una situación difícil que requiere de medidas urgentes.

Refirió que si el gobierno federal no convoca a ese acuerdo nacional, el Congreso de la Unión lo puede hacer. Se tiene que hacer un esfuerzo del mismo tamaño que en materia de seguridad, no pretendo molestar a nadie con lo que estoy diciendo, es algo que estamos viendo y viviendo.

Posteriormente, Ebrard Casaubon encabezó una reunión privada del Consejo para la Reactivación Económica del Distrto Federal, al término de la cual el secretario de Finanzas, Mario Delgado, señaló que el problema económico nacional es mayor a lo previsto, y muestra de ello es la caída 27 por ciento de las transferencias federales de enero a mayo, equivalente a 2 mil 600 millones de pesos.

Explicó que para mitigar el impacto de esto, mantener la planta productiva y laboral, y concluir con las obras presupuestadas se amplió hasta el 31 de diciembre el programa de devolución del impuesto sobre nómina (ISN), la condonación de multas por omisión de pago de agua y predial, y se mantendrá el subsidio en el impuesto a espectáculos públicos.

La secretaria de Desarrollo Económico, Laura Velázquez, informó que se pondrá en marcha un plan integral para acelerar la apertura de negocios, el cual incluye la modificación a las leyes de Desarrollo Urbano, Procedimientos Administrativos y Establecimientos Mercantiles, a fin de reducir de 28 a siete días su apertura e informar a los inversionistas en un plazo no mayor a 24 horas si su proyecto es viable y en qué zonas de la ciudad.

La próxima puesta en operación de la Oficina de Apertura Rápida de Negocios permitirá al Distrito Federal mejorar su posición e impactar positivamente a la economía del país en materia de inversión y empleo, con lo que seremos la ciudad que tarde menos días en autorizar un negocio, acabando con actos de corrupción, discrecionalidad y coyotaje, como ha demandado el sector empresarial.