París, 14 de junio. Los directivos de la Compañía Europea de Aeronáutica, Defensa y Espacio (EADS, por sus siglas en inglés) y de Airbus pidieron hoy prudencia a la hora de buscar la explicación del accidente del pasado primero de junio del avión A330 de Air France, que volaba entre Río de Janeiro y París con 228 personas a bordo, al considerar que estos accidentes suelen ser resultado de causas diversas.

Louis Gallois, presidente ejecutivo de la EADS, casa matriz del constructor aeronáutico Airbus, señaló que no sabemos si los Pitot (las sondas que permiten medir la velocidad durante el vuelo) tuvieron algo que ver en el accidente, nadie lo sabe,

La Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA, por sus siglas en francés), encargada de la investigación técnica sobre el accidente, apuntó a un mal funcionamiento de esas sondas, aunque tampoco concluyó que éstas fueran la causa de la catástrofe.

De su lado, Tom Enders, presidente ejecutivo de Airbus, advirtió que las afirmaciones especulativas sobre las causas del accidente pueden llegar a soslayar el trabajo de las autoridades que investigan los hechos y no benefician a ninguna de las partes afectadas.

Según el diario británico The Times, uno de los 24 mensajes automáticos enviados por el avión minutos antes de desaparecer indica un problema con el limitador del timón, un mecanismo que controla qué tanto puede moverse. Hay gran cantidad de información, pero no muchas claves, señaló la fuente que pidió el anonimato.

En tanto, algunos restos de la aeronave que fueron rescatados de alta mar por la fragata Constitución, de la marina de Brasil, llegaron hoy a Recife, donde serán entregados a las autoridades francesas, que investigan las causas de la tragedia.

Asimismo, el número de cuerpos de las víctimas rescatados de alta mar fue rectificado el domingo por la Fuerza Aérea brasileña, después de que los peritos del Instituto Médico Legal de Recife constataran que había 43 cuerpos humanos y no 44, como se informó anteriormente.