Mazatlán, Sin., 19 de junio. La entrada de la depresión tropical 1-E a costas sinaloenses ocasionó en Mazatlán y en poblaciones rurales la suspensión del suministro de energía eléctrica, desabasto de agua potable, afectación al servicio de telefonía fija y celular, así como al alumbrado público, debido a la caídas de postes, árboles, anuncios espectaculares y semáforos en la ciudad, además del cierre del puerto a embarcaciones menores.

El Consejo Estatal de Protección Civil se declaró en sesión permanente para seguir de cerca la evolución de este meteroro, que según datos del servicio meteorológico local, los vientos alcanzaron velocidad cercana a los 55 kilómetros pero con rachas hasta de 70 kilómetros por hora durante 30 minutos, lo que generó lluvias de 70 milímetros.

En los municipios de Navolato, Culiacán y Elota cayeron lluvias de ligeras a moderadas; las autoridades descartan problemas de inundaciones, aunque se mantienen en estado de alerta ante cualquier eventualidad.

Josefina García Ruiz, secretaria de Seguridad Pública de Sinaloa, informó que el pasado 15 de mayo, cuando se anunció el inicio de la temporada de ciclones en el Pacífico, se trabajó en todos los municipios para detectar zonas de riesgo.

Informó que 222 sitios podrían operar como albergues, para ofrecer resguardo a unas 61 mil 200 personas.

Alerta naranja

Protección Civil de Mazatlán señaló que las autoridades se encontraban en alerta naranja, para prestar auxilio a la población, por lo que declararon el primer albergue establecido en las instalaciones de la Escuela de Turismo de la Universidad Autónoma de Sinaloa, en caso de que se requiera desalojar a la población.

La junta municipal de ese municipio reportó el desabasto de recurso líquido a la mitad de la población, debido a los efectos de los vientos que paralizaron 17 pozos que distribuyen el agua potable a la ciudad y a zonas rurales.