Cancún, QR, 2 de julio. Con la pandemia de influenza AH1N1 el futuro es incierto y los países deben prepararse para una segunda ola de infección en el invierno, más severa que la de los meses pasados, pues el nuevo virus es amenazador e impredecible, advirtió Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Afirmó que el mundo está ante un virus caprichoso, una amenaza, cuyo comportamiento futuro se desconoce debido a la capacidad que tienen las cepas de influenza de mezclarse. Apenas es el inicio de la pandemia y no sabemos qué viene, advirtió durante la Reunión de alto nivel. Lecciones aprendidas de la influenza A/H1N1.

El encuentro, en el que participan ministros y viceministros de salud de 40 países, representa la mejor evidencia de que México es un país seguro, el cual se puede visitar, y particularmente este destino turístico que resultó afectado por la estigmatización sufrida por México a escala internacional, a causa de la influenza humana, señaló el presidente Felipe Calderón, quien fue respaldado por la directora de la OMS.

Chan reiteró su convicción de que las restricciones de viaje y el cierre de fronteras carecen de utilidad para detener la transmisión del virus.

En la ceremonia de inauguración, la directora de la OMS también señaló la importancia de no caer en los extremos de generar pánico en la sociedad, pero tampoco instalarse en la complacencia. En medio está la vigilancia y el liderazgo de los gobiernos para transmitir información clara y precisa sobre la situación de la enfermedad en cada ciudad.

Subrayó la importancia de la colaboración internacional para enfrentar este “tsunami epidemiológico”, y reconoció las acciones emprendidas por México, Estados Unidos y Canadá, la colaboración y apoyo que dieron los dos últimos al gobierno mexicano, y principalmente, mencionó la relevancia que tuvo la decisión de nuestro país de advertir al mundo de manera temprana sobre la presencia de la influenza A/H1N1.

La OMS y la comunidad internacional, dijo, “tienen mucho que agradecer a estos tres países por sentar un precedente que hasta ahora casi todas las naciones y la propia OMS han seguido para mitigar los efectos del nuevo virus de la gripe.

En su turno, Calderón Hinojosa reprochó a los países que discriminaron a los mexicanos y cerraron sus fronteras durante la epidemia de influenza, porque ahora están en una situación similar, dijo, sin mencionar de manera directa a Argentina, por ejemplo, donde el virus ya ha ocasionado más de 25 decesos y por lo cual ya se declaró la alerta sanitaria.

Nada más que México responderá con lo que pedíamos: solidaridad y comprensión, señaló.

Luego de hacer un recuento sobre los días de la epidemia, a partir del 23 de abril, cuando se confirmó la presencia del nuevo virus, Calderón propuso a los participantes en la reunión que se revise la forma para mejorar la vía de comunicación acerca de las distintas fases de la alerta de la OMS, con la finalidad de que la información sea eficaz y no genere incomprensión, distorsión o discriminación, como la que nosotros sufrimos.

Mencionó que la información que se difunda deberá enfatizar los datos sobre el grado de letalidad del virus, con lo que también se contribuiría a una mayor comprensión de la dimensión del problema entre las sociedades.

Calderón resaltó que en el caso de México se decidió dar prioridad a la salud de su población antes que cualquier consideración de tipo económico. De ahí que se haya decidido suspender las actividades escolares y el cierre de lugares de esparcimiento, incluidos estadios de futbol, entre otros. Estas medidas de distanciamiento social permitieron detener la transmisión de la infección, la que según la OMS, pudo haber ocasionado la muerte de alrededor de 9 mil personas, debido a que el sistema de salud se habría visto rebasado por la demanda.

Más tarde, en la primera sesión plenaria, Keiji Fukuda, director general adjunto para la Seguridad y el Ambiente Sanitarios de la OMS, actualizó las cifras de la pandemia que ya está presente en 121 países con más de 80 mil casos y 337 muertes confirmadas. En México, el número de afectados asciende a 10 mil 687, con 119 decesos, informó el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos.