Que investiguen. Nos hemos comportado de acuerdo con la ley y no van a encontrar nada que se contraponga a las leyes, señalaron por separado Manuel Corral, secretario ejecutivo de relaciones públicas de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), y Hugo Valdemar, vocero de la arquidiócesis de México, en relación con la instrucción girada por el Tribunal Electoral de Poder Judicial de la Federación (TEPJF) al Instituto Federal Electoral (IFE) para que indague si la Iglesia católica violentó la ley comicial.

Los sacerdotes destacaron que la Iglesia no tiene miedo a una auscultación, porque se ha ceñido al marco legal, no lo ha transgredido, tanto así que pueden revisar lo que quieran, no van a encontrar nada, aseveró Valdemar al destacar que la Iglesia está en su derecho de expresar sus valores morales y no le pueden prohibir expresarse, por ejemplo al defender la vida.

Eso es nuestro derecho y nadie ni el IFE nos lo puede impedir; es la misión de la Iglesia y, aunque llegaran a prohibirlo, no podríamos dejar de decirlo. La misión de la Iglesia está por encima de las leyes humanas, porque nos viene de Cristo, de Dios y está sobre la ley de los hombres.

Corral criticó que se haga una denuncia general. Si saben de algún ministro que haya violado la ley, que se finquen responsabilidades. Añadió que la Iglesia seguirá defendiendo la vida desde la concepción hasta la muerte natural, pese a que esto se contraponga con otras visiones.

En cuanto a si este fin de semana en las misas los curas harán llamados a acudir a las urnas, Corral señaló que no existe ningún lineamiento de la jerarquía sobre abstenerse de hacerlo, así que cada clérigo determinará si en los servicios religiosos llama a votar. En contraparte, Valdemar consideró que la labor ya está hecha y la gente ya está harta de tanta campaña política, nosotros no seremos alguien que los harte aún más.

Sobre la misa que encabeza el cardenal Norberto Rivera los domingos al mediodía en la Catedral Metropolitana, Valdemar precisó que el 5 de julio no será la excepción. Nadie le puede impedir que celebre misa e incluso que dé orientaciones morales; ésa es su misión y debe cumplirla.

Valdemar destacó que en lugar de intentar castigar a la Iglesia por intervenir en el tema electoral, al contrario, el IFE debería darnos una medalla de agradecimiento, porque la Iglesia ha estado exhortando a la población a tomar conciencia de su responsabilidad social, emitiendo el voto; es una labor que ha hecho la Iglesia, quizá mayor que la del instituto, que era su tarea.