La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) detuvo a tres personas más presuntamente implicadas en el secuestro de Yolanda Ceballos Coppel, las cuales se encuentran en calidad de presentadas ante el Ministerio Público de la Fuerza Antisecuestros, señaló el titular de la dependencia, Miguel Ángel Mancera.

Se trata de una mujer y dos hombres, quienes están vinculados a Pablo Salazar, detenido durante el intento de rescate de la directiva de Grupo Oceánica, y que aparentemente estuvieron en contacto con el presunto secuestrador y sabían del plagio.

En cuanto al líder de la banda de plagiarios, conocido como El Iván, fuentes de la PGJDF señalaron que durante su vida utilizó por lo menos cinco nombres: Sergio Flores Caballero, Juan Carlos Ramírez Pérez, Sergio Martínez Castillo, Sergio Flores Castillo y Armando Gutiérrez Solís.

Sobre este sujeto, el procurador capitalino confirmó que El Iván estuvo relacionado con un secuestro en 2007, por el cual se le giró orden de aprehensión, además de que estuvo sujeto a proceso por robo de vehículo agravado. De hecho, confirmaron fuentes de la PGJDF, estuvo preso en 2001 en el Reclusorio Preventivo Sur por robo agravado, delito por el que fue condenado a 30 años de cárcel, pero salió cuatro años después, aparentemente luego de obtener el beneficio de la preliberación, señalaron las fuentes consultadas.

Por otra parte, Isabel Miranda de Wallace, presidenta de la organización civil Alto al Secuestro, afirmó que hubo falta de coordinación entre autoridades federales y locales en el intento del rescate de la directiva del Grupo Oceánica, toda vez que ya había una denuncia en la Subprocuraduría de Investigación Especializada en el Delincuencia Organizada de la Procuraduría General de la República por el secuestro de Ceballos Coppel.

Aunque dijo que la acción policiaca se realizó de acuerdo con los protocolos establecidos, señaló que ante las dudas que rodean al caso, la PGJDF debe explicar de manera transparente lo sucedido la madrugada de ese viernes, pues en este operativo perdimos todos: la policía, los ciudadanos, la familia de víctima, sobre todo, e incluso los delincuentes.

Dijo que lo sucedido pone en evidencia que métodos como Plataforma México no están funcionado de manera correcta, ya que, aseguró, la información no se comparte debido a la desconfianza entre los elementos de las procuradurías local y federal.