Al cierre de 2009, el sector de la construcción podría registrar un decrecimiento de 8.8 por ciento, lo que se traduciría en una pérdida de 249 mil empleos, afirmó el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Humberto Armenta.

Entrevistado después de una reunión con representantes del sector empresarial, Armenta explicó que las estimaciones en el sector se deben principalmente a la falta de capital privado de riesgo en el mercado internacional, como consecuencia de la crisis financiera mundial.

Los cálculos, explicó el dirigente, se hicieron en función de las variables al cierre del primer semestre.

Esperamos que cambien las variables que tenemos a la vista durante el tercero y cuarto trimestres, para poder revisar nuevamente nuestros pronósticos y que puedan ser más alentadores, señaló.

Falta de empuje gubernamental

Añadió que el Programa Nacional de Infraestructura 2007-2012 –promovido por el gobierno federal para contener la recesión– no ha tenido el empuje que se esperaba para el sector, a pesar de que se han hecho muchas cosas para poder impulsar: cambios legislativos, voluntad política y un presupuesto sin precedente.

Según cifras de la CMIC, la inversión física presupuestaria en 2009 asciende a 534 mil 276 millones de pesos, 45 por ciento más que en 2008, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).

No obstante, señala el organismo, los recursos no están llegando en tiempo y forma a los constructores, quienes también enfrentan una regulación poco efectiva que retrasa o detiene la inversión pública.

Hace tres meses manifestábamos la necesidad de agilizar e impulsar la inversión pública ante la falta de capital privado, por medio de diferentes reformas logradas, pero éstas no se están aplicando, explicó Armenta.

Del total del presupuesto, casi la mitad corresponde a proyectos de inversión que realizará Pemex (227 mil millones de pesos), y 11 por ciento (61 mil millones de pesos) a obras de infraestructura de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Ambas dependencias concentran casi 300 mil millones de pesos, indicó.

El líder de los constructores urgió al poder Ejecutivo a que publique cuanto antes el reglamento con las reformas a la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas.

En el primer trimestre del año, promovimos diferentes reformas a esa ley, que tenían como objetivo agilizar e impulsar la inversión pública; las modificaciones ya fueron aprobadas el 28 de mayo, pero su entrada en vigor se está retrasando, porque se espera la publicación del reglamento respectivo, señaló Armenta.

El otro motivo causante del retraso en la ejecución de proyectos es la desaceleración en la actividad económica de México, que está provocando una caída en la recaudación fiscal.