El uso de la fuerza desalienta el turismo: empresarios del sector
Domingo 19 de julio de 2009, p. 5
Morelia, Mich., 18 de julio. Quinientos policías federales arribaron este sábado a Michoacán, adicionales a los mil 500 de hace dos días, que se suman a 2 mil anteriores y otros 2 mil soldados emplazados desde diciembre de 2006, mientras continuaban la instalación de retenes en carreteras y los patrullajes en municipios costeros y de tierra caliente, informó la 21 Zona Militar.
En los más de 200 kilómetros de la autopista Morelia-Lázaro Cárdenas hay vigilancia minuciosa y en Morelia el operativo de fuerzas federales conjuntas abarca el centro histórico y las colonias populares, lo mismo que en Uruapan, Zitácuaro, Huetamo, Apatzingán, Lázaro Cárdenas, Arteaga y Nueva Italia, principalmente.
En ese contexto, hoteleros morelianos señalaron que el afán de volver a la normalidad por medio de la fuerza represiva y disuasiva del Estado es un factor de confianza, pero no incentiva la demanda de hospedaje, sino la desalienta, y acentúa la ausencia de turistas, principalmente extranjeros.
El desaliento de vacacionistas y la anulación de reservaciones hacen colapsar la economía estatal, y en esta temporada de verano los hoteles tienen una ocupación por abajo de 50 por ciento, que tiende a empeorar, de acuerdo con los empresarios del sector.
Mientras, la Comisión Estatal de Derechos Humanos instó a las fuerzas de seguridad federales a trabajar con mesura, para que no se descomponga todo.
El organismo humanitario ha recibido 52 quejas este año por abusos, detenciones ilegales y tortura, sobre todo en la región de Tierra Caliente, donde hay acusaciones graves desde que iniciaron los operativos contra la delincuencia organizada.
Lo anterior, aunado a que las fuerzas de seguridad estatales permanecen al margen de las operaciones, por la desconfianza que se les tiene, según acepta el gobernador Leonel Godoy.