Es considerado también responsable del atentado contra el periodista Jesús Blancornelas
Lunes 27 de julio de 2009, p. 6
Fue sentenciado a más de 11 años de prisión Alfredo Araujo Ávila, El Popeye, quien fue jefe de sicarios del cártel de los Arellano Félix y es acusado de participar en el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo.
Ayer la Procuraduría General de la República (PGR) informó que este sujeto fue encontrado por la autoridad judicial penalmente responsable de la comisión del delito de acopio de armas de fuego de uso exclusivo de las fuerzas armadas, por lo que el juez sexto de distrito de procesos penales federales en Toluca, estado de México, le impuso una pena de 11 años y tres meses de prisión, y 200 días de salario mínimo vigente de multa.
Al hoy sentenciado también se le atribuye el hecho de poseer parte del armamento utilizado el 24 de mayo de 1993 en el aeropuerto internacional Miguel Hidalgo de Guadalajara, Jalisco, en los hechos en que perdió la vida el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo
, expuso la PGR.
De acuerdo con las investigaciones desarrolladas por la fiscalía antidrogas, se pudo establecer que Alfredo Araujo Ávila era colaborador del grupo delictivo encabezado por Ramón Arellano Félix, además que es considerado como sicario en el barrio Loogan, en San Diego, California, en Estados Unidos, como integrante de la denominada Mafia Mexicana.
Araujo Ávila, detenido por militares en enero de 2008, también es considerado como presunto responsable del atentado cometido en contra del periodista Jesús Blancornelas.
El 17 de noviembre de 1997, El Popeye intentó ejecutar a Blancornelas en Baja California, hechos en los que el escolta del comunicador perdió la vida.
El Popeye, de 48 años, de nacionalidad estadunidense fue detenido el año pasado como consecuencia del trabajo de inteligencia militar en el domicilio marcado con el número 104 de la calle Sarabia, en la colonia Obrera de la Primera Sección en Tijuana.
De acuerdo con los expedientes de la PGR, Araujo Ávila era uno de lo hombres de mayor confianza de Benjamín Arellano Félix, jefe de dicho cártel.